Sogama iniciará su período de pruebas en Vilanova en el mes de diciembre

La planta de ubicada en el polígono industrial de Baión dará servicio a 26 concellos, procesará 15.000 toneladas de residuos anuales y está previsto que genere 6.000 de fertilizante
El presidente da Xunta, Alfonso Rueda y la vicepresidenta segunda y conselleira de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda, Ángeles Vázquez, visita la nueva planta de Biorresiduos de Vilanova de Arousa. DAVID CABEZÓN
photo_camera El presidente da Xunta, Alfonso Rueda y la vicepresidenta segunda y conselleira de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda, Ángeles Vázquez, visita la nueva planta de Biorresiduos de Vilanova de Arousa. DAVID CABEZÓN

Dos años de trabajo, realizado por cuatro empresas, concluyeron con la construcción de la planta de compostaje situada en el polígono industrial de Baión (Vilanova), que iniciará su período de pruebas en diciembre con la finalidad de estar plenamente operativa en enero del año 2024.

El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, y la vicepresidenta y conselleira de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez, visitaron este sábado sus instalaciones acompañados por una representación de alcaldes y ediles de algunos de los 26 concellos de las provincias de Pontevedra y A Coruña que usarán este servicio.

Mirta Sueiro, responsable de la planta, precisó que la inversión realizada ascendió a 15,8 millones de euros, de los 45 que destina la Xunta a la construcción de este tipo de plantas en las cuatro provincias. 

A estas instalaciones está previsto que lleguen los residuos generados por 327.000 habitantes. La previsión que baraja es procesar 15.000 toneladas anualmente, más 7.000 de material estructurante, que producirán 6.000 de fertilizante en un plazo de ocho semanas.

El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, durante la visita a Sogama, saluda a Mirta
El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, durante la visita a Sogama, saluda a la responsable de la planta, Mirta Sueiro. David Cabezón


Sueiro subrayó que se trata de una instalación autosuficiente, ditada de 1.129 módulos fotovoltaicos, aprovechará el agua procedente de la lluvia y no provocará ruidos y malos olores.

Finalizado el recorrido, el alcalde de Vilanova, Gonzalo Durán, recordó que "esto de mezclar restos vegetales con orgánicos es lo que se lleva haciendo en las casa de Galicia toda la vida". A renglón seguido, mantuvo que "tampoco anduvimos tanto", precisando que ahora llega el momento de hacerlo "a lo bestia", y finalizó y intervención señalando que "nos toca a los alcaldes ponernos las pilas y mandar material en condiciones correctas". 

Cuando comenzó a hablar Alfonso Rueda, llegaba con intensidad el sonido provocado por un fuerte chaparrón, de ahí que aprovechase para resaltar que las instalaciones lo aguantaron bien. El presidente de la Xunta indicó que la planta de Baión será la de mayor capacidad de las cuatro de cabecera que estarán operativas en Galicia, complementadas por otras de carácter auxiliar.
Rueda instó a la ciudadanía a reciclar, tal como exigirá la Unión Europea desde el 1 de enero de 2024, adquiriendo nuevos hábitos cuando estén instalados los contenedores azules, reservados para la fracción orgánica.


Los alcaldes de la comarca do Salnés reclaman ayudas para hacer frente a la factura

La puesta en marcha de nuevos proyectos, la implantación de nuevos sistemas o la aplicación de una nueva normativa conllevan siempre la exigencia de realizar inversiones, y es lo que sucede con la dotación de los contenedores marrones destinados a la fracción orgánica, y la necesidad de disponer de un vehículo adaptado para realizar este servicio e, incluso, de más personal. 

Después de realizar este preámbulo, y hablando en nombre de la Mancomunidade do Salnés, el alcalde de O Grove, José Antonio Cacabelos, instó a la Deputación de Pontevedra a financiar la inversión, porque las administraciones locales no tienen más recurso para hacerle frente que aprobar subidas de los impuestos.

Reconoció el regidor que se trata de una competencia municipal, pero agregó que el Servizo de Axuda no Fogar es responsabilidad de la Xunta y los concellos deben hacer frente al 45% del total de la factura, que supone para O Grove entre 150.000 y 200.000 euros, un dinero con el que podría hacer frente a los gastos derivados de las nuevas exigencias en materia de gestión de residuos.
La presidenta de la Mancomunidade y alcaldesa de Meis, Marta Giráldez, cifró en 100.000 euros el desembolso que deberá realizar el Concello si no cuenta con ayuda.

Ángeles Vázquez afirmó que la Xunta mantendrá abierta una línea de ayudas y dijo que  la Xunta será flexible, aunque la capacidad de sancionar  también le corresponde al Gobierno central.