A consecuencia de las obras de renovación de las redes de saneamiento y aguas en el tramo final del río del Con y su desembocadura en la ría, la avenida de Rodrigo de Mendoza tendrá a partir de los lunes sentido único entre las rotondas de la Florida y de A Laxe, donde se puede ir hacia Ramón Cabanillas o la calle Arealonga. El sentido único será el descendiente, es decir, de entrada a la ciudad. Quien, utilizando Rodrigo de Mendoza, quiera llegar a la Florida tendrá que torcer en la rotonda de A Laxe hacia Ramón Cabanillas y luego girar a la derecha. Como salida de la ciudad también se puede usar el camino de A Laxe que desemboca en la avenida de Pontevedra, a la altura del cementerio.
Los cambios estarán vigentes durante un mínimo de ocho semanas, que es lo que se prevé que duren las obras. El plazo dependerá de las dificultades que se encuentre la empresa constructora. En todo caso, desde la Policía Local recomiendan evitar ese trayecto afectado por los trabajos, salvo que sea estrictamente necesario, cooperando así que la circulación sea lo más fluida posible. Con independencia de los semáforos provisionales que se van a colocar en la zona, los agentes también participarán presencialmente en la regulación del tráfico.
Con esa misma intención, el tráfico pesado (todo vehículo que tenga más de 3.500 kilos) quedará prohibido y solo se permitirá el acceso a ese tramo concreto de Rodrigo de Mendoza a los transportes menores y para dar servicio a los comercios y vecinos residentes de la zona. El carril-bici podrá seguir usándose sin ningún tipo de restricción, puesto que las obras no le afectan.
Ravella pide disculpas por los trastornos que se puedan causar y, igualmente, reclama la mayor colaboración ciudadana, tanto de los vilagarcianos como de quien visite la ciudad, subrayando que esas obras, como las molestias, son inevitables para lograr unos servicios que van a mejorar sustancialmente.
