El PSOE gana de nuevo pero pierde la mayoría absoluta
Tercera victoria consecutiva del PSOE en O Grove con José Antonio Cacabelos al frente, que no logró mantener la mayoría absoluta al haberse dejado atrás dos de sus diez ediles en una Corporación municipal en la que porque a la representación socialista se suman los tres concelleiros de Esquerda Unida y los dos del BNG, frente a un PP que mejoró ligeramente pero se queda con cuatro, cuando disponía de tres en el mandato anterior.
El PSOE obtuvo el 39,2%, EU el 17,65% y el BNG, el 14.34%. La participación fue del 63,84%, un porcentaje notablemente inferior al que se registró en otros concellos de la comarca de O Salnés.
Gonzalo Durán mejora sus registros y arrasa de nuevo
Llegaron los vecinos de Vilanova de Arousa a las elecciones tras una campaña marcada por la presencia de José Juan Durán (hermano de Gonzalo, el alcalde) al frente de una candidatura y la polémica entre el regidor y la cabeza de lista del PSOE, María Vales.
Y lejos de erosionar su respaldo, Gonzalo Durán, candidato del Partido Popular logró ampliarlo, marcando unos registros históricos: del 54,64% pasó al 61,07% y los 3.638 votos permiten cal PP contar con 12 ediles, los mismos que se deja el PSOE, que tenía cinco y ahora cuenta con tres, Renova entra con uno (José Juan Durán) y la otra acta es para el BNG. La participación fue del 70,90%.
El Partido Popular recupera el bastón de mando con David Castro
El fichaje del alcalde independiente David Castro por el PP permite a este partido alcanzar la mayoría absoluta y recuperar el bastón de mando en un municipio que en todas las citas electorales pone de relieve su carácter conservador, y de nada sirvió que algunos de sus antiguos compañeros montasen una candidatura alternativa.
El PP pasó de tres a siete representantes, sumando 1.587 votos (50,47%), y el PSOE también mejora sus registros y cuenta con tres, cuando tenía uno (630 y 20,03%). Xuntos, los nuevos independientes, tendrán un acta, al igual que Somos, que repite resultado, y el BNG, que se estrena.
Gana el PP, pero el escenario de Cambados queda abierto
Por cinco votos perdió su octava acta el PP de Cambados en las anteriores elecciones y esta formación afrontaba la cita con las urnas con el convencimiento de que además de hacerse con ella lograría situar a su noveno representante en la Corporación municipal, pero no fue así y por tercera ocasión consecutiva, el único edil de Pode tendrá la responsabilidad de decidir si el PP recupera el bastón de mando perdido hace ocho años o lo mantienen los socialistas, que lo ostentan desde entonces.
Y es que los registros que depararon la decisión de los votantes son casi un calco de los que hace dos mandatos: el PSOE sumó dos puntos porcentuales pero sigue disponiendo de cuatro actas, mientras que su socio, Somos, perdió uno de los tres con que contaba, que fue a parar a las filas del BNG, y la suma depara un empate.
Hace ocho años sucedió exactamente lo mismo y la incógnita no se despejó hasta minutos antes de que comenzase la sesión constitutiva de la Corporación municipal cambadesa.
De nada valió entonces que el PP se reuniese una y otra vez con este edil para tratar de convencerlo de que le diese su respaldo porque se mantuvo firme y convirtió a Fátima Abal en la primera alcaldesa da la historia, a pesar de que ideológicamente está mucho más cerca de los populares. Samuel Lago, que cogió el mando tras la dimisión de Abal, mejoró ligeramente los registros de la formación socialista, pero el equilibrio de fuerzas se mantiene.
En el PP, Luis Aragunde, (alcalde durante tres mandatos) dejó paso a Sabela Fole, que ahora se encuentar en una tesitura similar a la que tuvo que afrontar el último regidor popular.
Los escenarios que se abren en Cambados son dos: que el PP pueda gobernar en con una minoría mayoritaria, para lo que estaría legitimado con 3.387 votos y el 42,23% del total de los sufragios emitidos, un registro muy superior al alcanzado por cualquiera de sus contrincantes de la izquierda: PSOE (1.776,), Somos (980) y BNG (865).
Llama la atención que mientras el BNG dispondrá de tres asientos en la Corporación municipal cambadesa, a Pode solo le corresponde uno, cuando obtuvo 813 votos, 52 menos que los nacionalistas.
Carlos Viéitez consigue una aplastante victoria
La desbandada popular de hace cuatro años, después de que el alcalde Carlos Viéitez convirtiese a la socialista Marta Giráldez en presidenta de la Mancomunidade, cuenta desde este 28-M con el aval de la mayoría: el 57,2% eligieron la papeleta de Veciños de Meaño, que le permiten contar con ocho concelleiros, cuando contaba con seis.
Meaño Independiente (20,70%) dispondrá de 3 y el PP (8,30%) fue incapaz de rehacerse del mazazo, y solo tendrá un representante en la Corporación municipal, en la que entra el BNG con un edil (7,25%) y de la que desaparece el PSOE, que tenía dos (6,15%). La participación fue del 79,20%.
Marta Giráldez lleva al PSOE a la mayoría absoluta
Victoria impecable la del PSOE en el Concello de Meis, sumando 1.434 votos (47,64%), que le permite conseguir seis actas y con ellas la mayoría absoluta en al Corporación.
En un éxito que lleva el nombre de la alcaldesa, Marta Giráldez, que ostentó la presidencia de la mancomunidade durante el mandato anterior.
El PP de Marta Lucio con 1.163 votos y el 38,63%, perdió un representante, mientras que el BNG de Xoan M. Vázquez mantiene su presencia con un único concelleiro y Vox, con Ana Nartallo a la cabeza, se queda sin representación. La participación fue de 75,79%.
Los populares de A Illa ganan con Matías Cañon al frente
El PSOE de A Illa de Arousa sufre su primera derrota de la historia y lo hace frente al PP de Matías Cañón, que se rebeló contra la decisión de su partido de retirarse de la candidatura cuando trascendió que fue condenado pro violencia machista hace doce años.
Los socialistas perdieron tres actas y el BNG pegó un estirón, logrando así su mejor resultado histórico en el municipio isleño. Ambos cuentan con tres actas y la suma permitirá la continuidad de la izquierda al frente del Consistorio ante un PP que se llevó al 43,25% de los votos y 5 actas, una más que en el año 2019, frente al 28,77 y el 27,61 de sus rivales.
El PP se impone en Vilagarcía y el PSOE tendrá que pactar para mantener la Alcaldía
Aunque es habitual la apelación al optimismo hasta que el recuento de los votos no pone las cosa en su sitio, en el PP de Vilagarcía posiblemente no fuera muchos los que en su día fueron interno apostasen por unos resultados como los cosechados ayer. En sus cálculos figuraba aprovechar que el único edil de Ciudadanos va en su lista para sumar un acta y dos en el mejor de los cálculos. Pero logró sumar tres, y de cinco pasa a nueve, los mismos que el PSOE, que se dejó atrás tres, y además sufrió una derrota cuando había llegado a la cita con una cómoda mayoría absoluta.
El problema para los socialistas estriba en las expectativas que se había marcado, que pasaban por convertirse en el primer partido en encadenar dos mandatos con mayoría absoluta, para lo que daba por hecho que perdería un acta, y ahora se ver superado por el PP.
El éxito de los populares es la constatación de que apostar por aquellos que acreditan una larga trayectoria de trabajo en el partido cuenta con el respaldo de la militancia y los votantes habituales. Su alcaldable, Ana Granja tuvo que ponerse al frente del grupo municipal con el mandato avanzado después de que hubiesen presentado su dimisión quienes ocupaban los número uno y dos de la anterior candidatura. Sin estridencias, realizó su labor y se presentó a esta cita con las urnas liderando una candidatura muy renovada en la que despunta la presencia de la diputada autonómica Elena Suárez, que tiene una larga trayectoria en la vida municipal vilagarciana.
Un vistazo al panorama general pone de relieve el triunfo de las formaciones de izquierda, un factor que debería pesar lo suficiente como para que no se cuestione el acuerdo que permitirá a Alberto Varela mantener el bastón de mando por tercer mandato consecutivo. Pero también en este territorio se registraron novedades. Con el viento a favor, la recuperación del BNG figuraba en todas las quinielas después de un mandato en el que por motivos laborales de quien liderado la candidatura hace cuatro años estuvo ausente de la vida municipal. Los nacionalistas alcanzan las tres actas (su mejor registro histórico), y están llamado a convertirse en los socios del PSOE, y está por despejar la duda de la fórmula: en minoría o en coalición.
Esquerda Unida mantiene su única acta y quien desaparece de la Corporación municipal es Podemos, que había contado con una representante.
Telmo Martín mantiene sus diez ediles
La previsión era mantenerse y así lo hizo. Telmo Martín revalida los 10 ediles del Partido Popular en Sanxenxo, batiendo la marca de las pasadas elecciones de 2019 y consolida así su aplastante mayoría absoluta en el municipio para otros cuatro años más. Lo hace en unas elecciones con un panorama radicalmente diferente a los pasados comicios, con las candidaturas reducidas a la mitad, de las ocho anteriores a las cuatro actuales.
Se trata de un escenario que, si bien beneficia a la izquierda sanxenxina, no fue suficiente para alcanzar el pacto de izquierdas al que tanto PSOE como BNG estaban dispuestos, y que suben en un edil cada uno gracias a la concentración del voto. Así, el PSOE de Ainhoa Fervenza pasa de tres a los cuatro ediles actuales, y el BNG de Francisco Leiro de dos a tres, a falta del cierre del recuento. Podemos tampoco logra este año entrar en el Gobierno.
