La Fiscalía rebaja la petición de pena para un pontevedrés acusado de abusar de una joven

Los hechos ocurrieron en Vilagarcía de Arousa ▶ Aunque no se ha probado el uso de la fuerza, se acredita la versión de la víctima de que "se produjo una penetración no consentida" 

 Exterior de la Audiencia Provincial de Pontevedra. DAVID FREIRE
photo_camera Exterior de la Audiencia Provincial de Pontevedra. DAVID FREIRE

Fiscalía ha rebajado este martes la petición de pena a un joven pontevedrés acusado de abusar de una chica al no ver probado el uso de fuerza. La sección segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra ha dejado visto para sentencia el juicio.

Así, en sus conclusiones finales, la Fiscalía ha modificado su petición de penas al considerar al encausado autor de un delito de abuso y no de agresión sexual, pues entiende que durante el juicio no ha quedado probado el uso de la fuerza física. En concreto, ha bajado su petición de los 12 a los 7 años de prisión.

También ha modificado de 12 a 7 años la solicitud de inhabilitación absoluta y de 10 a 7 años de libertad vigilada y pide que se le prohíba acercarse o comunicarse con la víctima durante 17 años, frente a los 22 que figuraban el escrito inicial.

En concepto de responsabilidad civil, la Fiscalía mantiene que este individuo debe indemnizar a la denunciante con 210 euros por las lesiones sufridas y 20.000 euros por el daño y perjuicio moral sufridos.

CREDIBILIDAD A LA VÍCTIMA. Durante la vista oral celebrada este martes la denunciante ha declarado a puerta cerrada. Según han coincidido en señalar tanto el fiscal como la abogada de la acusación particular, la declaración de la víctima "reunió todos los requisitos que pide la jurisprudencia" y, "a pesar de su nerviosismo", hizo un relato de los hechos "detallado, sereno, sin contradicciones y coherente".

Esta chica explicó ante el tribunal que el 6 de junio de 2021 se encontraba en casa de los padres de una amiga en Vilagarcía de Arousa donde estaba otro chico. A lo largo de la noche se les sumó el acusado, que era amigo del chico que estaba en la casa y al que ella no conocía de nada. Esa noche, todos estuvieron charlando y consumiendo bebidas alcohólicas.

Durante las primeras horas de la mañana, la joven subió a una de las habitaciones de la casa para dormir y, sin siquiera llegar a quitarse la ropa que llevaba, cayó en un sueño profundo.

El Ministerio Público sostiene que poco después el acusado "subió también a la misma habitación y se acostó en la cama con la mujer, y en un momento dado, con ánimo libidinoso, se desnudó y, actuando sin el consentimiento de ella, empezó a tocarle el pecho, los glúteos y la zona genital, a pesar de que ella, aún adormilada, le retiró varias veces las manos". Entonces el procesado le separó la braga y la penetró vaginalmente. En ese momento la joven se despertó empujando a un lado al procesado y saliendo de la habitación gritando para pedirle ayuda a la amiga.

Entonces las jóvenes increparon al acusado llegando a propinarle un bofetón que provocó su caída por las escaleras interiores de la vivienda.

EL ACUSADO LO NIEGA. El acusado también ofreció su versión de lo ocurrido. Respondiendo únicamente a las preguntas de su abogado. Relató que aquella noche estuvo de cena con sus compañeros del equipo en el que jugaba como delantero, el Arosa SC, y luego fue a la casa de sus amigos.

"Había bebido y después tomamos más copas" y cuando "pregunté dónde podía dormir", que fue "donde me dijo la dueña de la casa", era la habitación donde estaba la otra chica que estaba durmiendo encima de la cama y a la que despertó cuando "nos tapamos con una manta".

Entonces asegura que se "enrollaron", aunque ha defendido que todo fue consentido. "Ella estaba despierta, para nada estaba dormida", ha recalcado. Ha negado que se produjese penetración.

Las pruebas periciales practicadas por las médicos forenses y la policía científica revelaron que había restos de ADN con perfil genético coincidente con el del acusado en el interior del fondo de la vagina de la joven, "que necesariamente tuvo que derivar de una penetración".

Además de estos datos objetivos de carácter biológico, el fiscal entiende que "de la prueba practicada se acredita que el acusado realizó una penetración no consentida".

El representante del Ministerio Público sostiene que la declaración de la víctima contiene "elementos objetivos que acreditan su veracidad" y ha recordado que desde el primer momento la joven ha contado la misma versión de los hechos a sus amigos, a la Policía, a los médicos, en su comparecencia ante el juzgado instrucción y hoy de nuevo en la Audiencia Provincial.