La Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Pontevedra ha condenado a una pena de tres años de prisión (que quedará en suspenso si la procesada cumple determinados requisitos) a una joven, vecina de Vilagarcía, de nacionalidad colombiana, por un delito contra la Salud Pública, después de ser sorprendida en posesión de numerosas dosis de cocaína preparadas para su venta en el interior del establecimiento de hostelería propiedad de su madre y en el que trabajaba como camarera.
Los hechos que desembocan en la sentencia se produjeron el 18 de noviembre de 2021, cuando, en el citado bar, ubicado en las inmediaciones del mercado de Abastos de la capital arousana, se produjo una inspección policial. En el marco de la misma, de la cual la investigada "fue informada y se mostró conforme", según detalla la sentencia, fue sorprendida en posesión de un envoltorio con cocaína.
"En ese momento, de forma voluntaria y espontánea, la acusada les manifestó a los agentes que no continuasen con la inspección, que tenía más sustancia escondida en la parte superior del establecimiento", añade el dictamen. Les entregó un calcetín que tenía escondido en un altillo, dentro de un bote, que contenía 33 pequeños envoltorios de cocaína. "Esta sustancia la poseía la acusada con el fin de destinarla a su distribución lucrativa en el mercado ilícito". La Policía también intervino 780 euros en billetes fraccionados.
Con tales indicios, la acusada optó por reconocer los hechos en sede judicial, por lo que, con la atenuante de confesión, fue condenada a tres años de cárcel que no cumplirá en un centro penitenciario siempre que no delinca durante los próximos cinco años y se someta a un tratamiento de deshabituación de la cocaína.
