Una operación efectuada de forma conjunta por la Policía Nacional y el Servicio Nacional Aeronaval de Panamá sirvió para intervenir un cargamento de 349 kilos de cocaína ubicados en el interior de un contenedor marítimo que llegó al país en un mercante procedente del puerto de Guayaquil, en Ecuador, y con destino final en el de Vigo siguiendo una ruta similar al intervenido recientemente con 7.500 kilos de la misma droga entre lomos de atún congelado.
En esta ocasión, los narcotraficantes apostaron por el método del gancho ciego, colocando la droga en bultos sobre mercancía lícita, en la confianza de disponer de rescatadores en el puerto español para hacerse cargo de la cocaína sin ser descubiertos por las autoridades. Se sospecha que el Balkan Cartel, dominador de los puntos de salida y de destino, por lo visto recientemente, estaría detrás del narcotransporte.