El templo nuevo, protagonista de la XIV edición de Sanxenxo na Historia

El catedrático de Historia, Jose Manuel García Iglesias, e Isidoro Sabell, gran conocedor del municipio, estuvieron en la mesa redonda inaugural
XIV edición de Sanxenxo na Historia. DS
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El templo nuevo centró este lunes la jornada inaugural de Sanxenxo na Historia haciendo un repaso del tipo de construcción, así como de los impulsores de uno de los edificios más emblemáticos del municipio por su estructura hexagonal y sus características arquitectónicas. La concejala de Cultura y Eventos, destacó la labor de la Asociación de Estudos Locais (Aelos) a lo largo de estos catorce años y le animó “a continuar mellorando e renovando a cita que xa é un referente no verán de Sanxenxo”. El acto de apertura estuvo presidido por la concejala de Cultura; el diputado Marcos Guisasola y el presidente de Aelos, Marcelino Agís

El catedrático de Historia, Jose Manuel García Iglesias, e Isidoro Sabell, gran conocedor del municipio, fueron los encargados de inaugurar la cita con la mesa redonda titulada Patrimonio histórico-artístico: O Templo novo de Sanxenxo con Angeles Marcos como moderadora. Ambos participaron además con sus textos en la reciente publicación del libro “La nueva iglesia parroquial de San Ginés de Padriñán. Historia y ser de un sueño hecho realidad”. Sabell hizo un repaso por la biografía del párroco Ramón Somoza, el arquitecto Gaspar Robles, el canónigo Alejandro Barral y el actor y donante del terreno, Manolo Morán, como promotores del edificio.   “Don Ramón era de carácter reservado, perseverante, directo y regañón. Su gran reto era poner en marcha la construcción del templo para dar a la colonia veraniega los servicios religiosos adecuados en un nuevo templo amplio y moderno, lo que significaba enfrentarse a un trabajo ingente”, aseguró Sabell. 

No fue fácil, pero el primer apoyo fue el del actor Manuel Morán. “Este singular y bondadoso veraneante no tuvo reparos en revertir a la parroquia el solar que había adquirido con anterioridad, cesión en la que perdió una considerable cantidad de dinero sobre el precio de compra”, expuso Sabell. Gaspar Robles fue otra de las piezas claves. “Un joven y prometedor arquitecto que puso en su trabajo una esmerada profesionalidad e ilusión”. El proyecto de Gaspar Robles tuvo la aprobación del arzobispado en 1965 y la construcción duró nueve años. armonizar esta etapa con la arquitectura tan innovadora del templo. Por delante estaba estudiar los espacios y sus funciones, la iconografía y una estética actualizada. Labor que se realiza con el asesoramiento del canónigo compostelano Alejandro Barral, director del Departamento de Arte Sacro de la Diócesis de Santiago, presidente-director del Museo Compostelano y secretario del Consejo de Fábrica, por tanto, responsable de la organización y conservación de las obras del patrimonio compostelano.

Por su parte, Jose Manuel García destacó el encargo al arquitecto Gaspar Robles como “un nuevo tiempo iniciado por las directrices emanadas del Concilio Vaticano II. Desde esa coyuntura se comprende no solo el resultado arquitectónico sino también el modo en que fue concebido, en su interior, su culto”. También subrayó el papel de José Luis Sánchez, en ese momento, diseñando el presbiterio, con su Calvario y sagrario. “Después vendrían otras obras de singular relieve: el Vía Crucis, esculpido por Aurora Cañero; la imaginería del presbiterio, con un nuevo sagrario, encomendado a Castor Lata, también autor del Crucero, ubicado ante el templo, así como la imagen de la Asunción, a un lado del altar”, apuntó. 

En resumen, Jose Manuela García señaló que se trata de “una iglesia repleta de exponentes a reconocer entre lo mejor del arte gallego, en clave religiosa, de las últimas décadas del siglo XX y primera del XXI, que cuenta entre sus grandezas, con el interior de un singular sagrario, realizado por Fernando Mayer, sin duda entre los más bellos, quizás el que más, concebidos en Galicia”.