Estradense y Arosa prolongaron sus respectivas rachas a cuatro jornadas sin perder. El Arosa tuvo el control del juego durante más tiempo y envió dos balones al larguero, además de tomar ventaja, pero el revulsivo Juanín redujo el valor del tanto anotado antes por Mella. Empezaron bastante mejor los visitantes. Borja Míguez estuvo a punto de abrir el marcador a los cinco minutos con un durísimo tiro al larguero.
Pareció despertar el Estradense por medio de Porrúa: primero, con una acción personal en conducción finalizada con un disparo lejano que acabó en córner y, tres minutos después, ejecutó una falta directa que salió cerca del poste. El propio Porrúa dio el susto del primer tiempo por una dura entrada de Cotilla, amonestado por ello, pero finalmente pudo reincorporarse.
El Arosa ejerció una presión alta que le permitió recuperar muchos balones en campo contrario. Fruto de ello, cerca del descanso, hubo una inmejorable doble ocasión visitante: Santi Gegunde cabeceó al larguero tras un saque de esquina y el rechace le cayó a Borja Míguez, que, en boca de gol, remató como pudo y el balón salió desviado de forma inverosímil. Como réplica, una jugada individual de Migui pudo cambiar el escenario del partido, pues una internada suya acabó con un pase horizontal al corazón del área, donde José Sobrido dejó de cara para Raúl, el cual, muy tapado, no pudo precisar.
La reanudación del Arosa resultó avasalladora y acabó tomando ventaja por pura insistencia. Al tercer intento llegó el tanto del Arosa, anotado por Mella, ex del Estradense, de disparo ajustado al poste como broche a una larga jugada iniciada por Martín Diz. El Estradense mostró fortaleza anímica para buscar la igualada.
El conjunto local puso el balón en juego rápidamente buscando al espacio a Juanín, inicialmente suplente, que resolvió ante Manu Táboas en el minuto 74. Los compases finales fueron trepidantes. Hubo una clara ocasión por bando.
