El Mosteiro da Armenteira y muchas de las historias y leyendas que hoy perduran sobre este lugar se remontan al siglo XII. Y tienen gran parte de su sustento en las Cantigas de Santa María, obra destacada de la amplia y rica literatura española. La Virxe das Cabezas, representada con un pecho desnudo y que, supuestamente, dio al monje cisterciense San Bernardo unas gotas de la leche con la que amamantaba al Niño, sigue ahí, protagonista para nuestros contemporáneos por esas propiedades curativas que muchos le atribuyen, especialmente con las migrañas y otras dolencias de la cabeza. Su vigencia la confirman los cientos de devotos que una vez más acudieron a pedir la intervención de Nosa Señora o simplemente fueron a rendirle visita o a disfrutar de una jornada festiva en el campo.
Muchos llegan como romeros, caminando desde las localidades próximas. Otros de procedencia más lejana lo hacen en sus vehículos. Unos disfrutan de las misas, la veneración a la Virxe y la procesión. Algunos buscan la parte meramente festiva, la que se condimenta con música y una buena comida sobre el césped. Así, todos los Lunes de Pascua, salvo en pandemia, aunque las actividades de ocio y los oficios religiosos ya se pueden encontrar desde el mismo Sábado Santo y durante el Domingo de Resurrección. En esta ocasión las verbenas estuvieron amenizadas por Player's y el grupo Tania Veiras. También destacó la actuación del grupo de folk Ailá, así como la XX Festa da Xuventude con la música de los Djs Bruno Canario, Andre Melón y Paco Vulkano.
