A dos días del Pleno de investidura, el futuro del grupo del PSOE de Sanxenxo continúa sin esclarecerse, después de la renuncia consecutiva de dos ediles de la lista, Marta Caneda (número tres) y Rebeca Fernández (número cinco). Y es que, según apuntaron fuentes cercanas al partido, una crisis interna derivada del reparto de actas amenaza con romper el grupo, por lo que cabría la posibilidad de que, de no solucionarse, acabe con los ediles Ladislao Viñas (número dos), Antonio Cacabelos (número cuatro) y Fernando Otero (número seis) en el grupo mixto, o bien con la actual portavoz como concejala no adscrita. En este sentido, el partido tiene previsto celebrar este jueves una asamblea extraordinaria con la militancia con el objetivo de abordar la preconstitución del grupo municipal, y atajar las tensiones internas derivadas de la situación, que ponen en jaque la continuidad de Ainhoa Fervenza como portavoz.
De hecho, la propia Fervenza confirmaba este miércoles a este medio la existencia de "tensiones" dentro del grupo, aunque negó su salida como portavoz y, con ella, la ruptura del PSOE sanxenxino. "Evidentemente eso no pasará. Son temas internos y estamos trabajando para hacer un grupo potente de trabajo. Hay gente que quiere distorsionarlo todo. Mi idea es cerrar filas, estar todos juntos y unificarnos. Quiero que el partido siga bien y que la agrupación siga funcionando", aseguró. Para Fervenza, "tensiones hay en muchísimos sitios después de unas elecciones, pequeñas o grandes, pero todas son tensiones reconducibles", garantizó, asegurando que "la dimisión de Marta está clara, y la de Rebeca también fue por temas personales" y que "somos cuatro concejales que vamos a coger el acta".
Cabe recordar que, tal y como publicó Diario de Pontevedra el pasado 8 de junio, Marta Caneda renunció a su acta como edil electa por motivos de salud y personales y que, aunque ocupó un puesto alto en la lista en apoyo al partido, su decisión de no recoger el acta ya había sido comunicada con anterioridad. Tras la renuncia de Rebeca Fernández, el acta pasa a manos de Fernando Otero que, tal y como aseguraron desde el entorno del partido y la propia Fervenza, "sí la recogerá".
Así, las tensiones internas en el PSOE sanxenxino entre su actual portavoz y los otros tres ediles que, previsiblemente recogerán el acta, mantiene en vilo al PSOE provincial, después de que la última reunión concertada por el grupo no llegara a producirse ante la ausencia de la propia portavoz. El futuro del grupo local dependerá ahora de las directrices del partido y del resultado de la asamblea que decidirá la continuidad de los implicados.
