Vecinos de Carril denuncian el robo del cepillo de la Capilla de los Ángeles

También el fin de semana en el Concello se dio parte de un posible caso de maltrato animal y fue identificado un ciclista que se encontraba aparentemente bajo los efectos del alcohol
Vista panorámica de Carril. JOSÉ LUIZ OUBIÑA
photo_camera Vista panorámica de Carril. JOSÉ LUIZ OUBIÑA

La Policía Local acudió el viernes a la Capilla de los Ángeles ante la llamada de un grupo de vecinos. Denunciaron que la cerradura el inmueble fue forzada y que echaban en falta el cepillo. No sabían con exactitud la suma de dinero que podría contener, pero notaron que también faltaba el encendedor con el que se encienden las velas. Al lugar también acudió una patrulla de la Policía Nacional que, tras inspeccionar el lugar, dio aviso a la Unidad de Policía Científica para que practicase las pruebas necesarias y se encargase de la investigación.

Entre otras incidencias del fin de semana, la Policía Local dio parte al departamento de Medio Ambiente de un caso de posible maltrato animal. Se trata de un caballo que permanecía atado bajo el sol y sin agua para beber en una finca de Trabanca Badiña. Fue una llamada vecinal la que alertó de la situación que, al parecer, se lleva repitiendo desde hace tiempo. El animal estaba soportando las elevadas temperaturas inscritas el viernes bajo el sol y sin poder buscar refugio a la sombra por encontrarse atado. Además, el barreño que supuestamente tenía para beber  estaba completamente vacío. Avisado y desplazado al lugar, el propietario alegó que "el caballo no tenía sed", aspecto descartado por el propio animal que, segundo consta en el parte policial, vació en escasos minutos el barreño que le había llenado el personal de Emergencias avisado por los agentes. Dado que la situación, según le consta a la Policía, no era a primera vez que acontecía, se decidió dar parte al departamento de Medio Ambiente en base a la normativa sobre Bienestar Animal.

El sábado a las 2.20 de la madrugada, una patrulla que circulaba por la Avenida de Matosinhos detectó a un ciclista desplazándose por la misma vía que aparentemente se encontraba bajo los efectos del alcohol. Tras darle el alto, el hombre de 40 años se negó a la realizar la prueba de alcoholemia, razón por la que fue trasladado a las dependencias municipales para proceder su identificación y tramitar la correspondiente denuncia.