Los Charlines niegan haber blanqueado dinero del narcotráfico entre 2003 y 2010

Varios miembros de la familia están siendo juzgados en la Audiencia Nacional

 El clan de Los Charlines, durante el juicio en la Audiencia Nacional. SERGIO PÉREZ (EFE)
photo_camera El clan de Los Charlines, durante el juicio en la Audiencia Nacional. SERGIO PÉREZ (EFE)

Varios miembros de la familia de Los Charlines han negado este lunes en la Audiencia Nacional haber participado en ninguna operativa de blanqueo de dinero obtenido del narcotráfico en Galicia entre 2003 y 2010, una acusación por la que la Fiscalía pide para ellos entre cinco y seis años de cárcel y multas millonarias.

El clan ya fue condenado por blanqueo del tráfico de drogas en 2003, si bien la Fiscalía cree que, pese a la condena, sus miembros prosiguieron con esa actividad hasta 2010, cuando se puso en marcha este nuevo procedimiento que está siendo juzgado estos días en la Audiencia Nacional. 

En él figuraron como acusados el patriarca, Manuel Charlín Gama, y su hijo Manuel Charlín Pomares, si bien ambos fallecieron en 2021 y 2019, respectivamente. 

Los magistrados han escuchado este lunes los testimonios de los hijos de Charlín Gama -María José, María Teresa y Óscar Felipe-, y de sus nietas Noemí Outon Charlín y Natalia Somoza Charlín, que han rechazado de plano toda acusación contra ellos. Sólo Francisco Melchor Charlín se ha acogido a su derecho a no declarar. 

El resto ha declarado únicamente a preguntas de sus abogados y se ha desvinculado de las operaciones de blanqueo que la Fiscalía incluye en su escrito de acusación, como la inversión de 1,9 millones de dólares en China en una planta de elaboración y transformación de productos del mar en la ciudad de Qingdao, en la provincia de Shangdong. 

"Fui para hacer turismo, para ver ese mundo, que era una cultura diferente a nosotros", ha explicado María Teresa Charlín sobre su viaje a China con su hermano Melchor, y ha relatado su interés por "ese mundo" en una época en la que estaba viviendo una situación personal complicada, y "echaba noches sin dormir viendo las telenovelas turcas, chinas y de cuanto país hay".

Teresa Charlín, que fue absuelta de blanqueo en 2003, ha sido preguntada por la adquisición mediante una subasta pública de una depuradora de marisco intervenida a la familia, y ha asegurado que todo el dinero que emplearon para obtenerla "tuvo origen lícito".

"Los pagos se hicieron por banco", ha dicho, por su parte, su hija Natalia, a quien fue adjudicada la subasta en 2008.
La Fiscalía cree que, en realidad, Natalia actuó como "simple testaferro" de su madre, que era quien "realmente ponía el dinero" para la operación y que éste procedía del narcotráfico.

También la nieta de Manuel Charlín ha negado haber participado en ninguna operativa de lavado de dinero y, cuando su abogado le ha preguntado si tiene alguna relación con el tráfico de drogas o con el blanqueo de capitales, ha respondido: "No, el apellido".