El Parque do Espiñeiro (Portonovo) fue ayer el escenario del Festival Mundial de Ilusionismo. Un espectáculo del Mago Paco encandiló a decenas de niños y niñas, y también a algún mayor, que acudieron a la cita y participaron de forma activa en los juegos y trucos que ofreció el ilusionista.
Galicia se convierte en 2022 en el centro mundial de la magia gracias a este festival, uno de los mayores de Europa, que presenta a lo largo de toda la geografía gallega a los ilusionistas más premiados del momento.