"Se asusta a cantidade de plásticos que chegou ás praias, pense o que hai no mar"

En las últimas semanas, los temporales y mareas vivas han arrojado a la costa un gran volumen de basura no orgánica generada por la población, aunque es solo una muestra de la que hay en el agua. Colectivos de protección de la fauna marina advierten de sus fatales consecuencias

 Cientos de botellas de plástico, latas y otra basura de origen humano, entre los restos orgánicos acumulados en la playa de Lourido (Poio). RAFA FARIÑA
photo_camera Cientos de botellas de plástico, latas y otra basura de origen humano, entre los restos orgánicos acumulados en la playa de Lourido (Poio). RAFA FARIÑA

Desde hace días, algunos puntos del litoral de la ría de Pontevedra se han convertido en un desagradable recordatorio de la cantidad de basura no orgánica (sobre todo plásticos y latas) que se acumula en el mar. Los temporales no han hecho más que dejar a la vista una realidad que existe de forma permanente, aunque en otras épocas del año esa realidad se esconde bajo la superficie del agua y la población no la percibe de una manera tan obvia.

Las mareas vivas han arrastrado hasta las playas una gran cantidad de restos orgánicos como troncos, ramas y un importante volumen de sedimento llegado desde los ríos a causa de las crecidas. Pero el auténtico problema no son esos residuos producidos por la propia acción de la naturaleza, sino la basura generada por las personas.

Colectivos de estudio, protección y observación de la fauna marina recuerdan sus nefastas consecuencias. Uno de ellos es CEMMA (Coordinadora para o Estudo dos Mamíferos Mariños), que señala que hay especies muy vulnerables que se están viendo gravemente perjudicadas.

"Aínda que nos mamíferos mariños en xeral a incidencia da basura plástica que hai no mar non é elevada, hai grupos nos que si o é. Un é o dos grandes mergulladores, como os cachalotes ou os cifios. O 70% dos que aparecen varados presentan plásticos nos seus sistemas dixestivos e, moitas veces, estes son a causa da súa morte. As tartarugas mariñas son outra das especies más prexudicadas, tanto por inxerir os plásticos como por quedar atrapadas neles. As tartarugas que temos en recuperación no CEMMA están defecando plástico seguido e, en ocasións, tamén lles acaba provocando a morte. E outro grupo moi afectado é o dos filtradores, como os tiburóns peregrinos. Como estes animais se alimentan filtrando a auga, inxiren os plásticos que hai nela, polo que neles a incidencia tamén é alta", explica Alfredo López, biólogo de CEMMA.

Además de los mamíferos marinos, las aves también están entre las especies más dañadas.

Tal y como apunta Gustavo Ferreiro, representante de SEO BirdLife en Galicia, "os restos naturais dos arrastres de ríos, como os lodos, follas ou madeira, non lles afectan, porque están plenamente adaptadas a eles, pero os plásticos si o fan de maneira moi negativa. En primeiro lugar, as aves poden confundilos con alimento e inxerilos, o cal lle pode provocar obstrucións intestinais ou outras afeccións internas e mesmo atragantamentos. Por outra banda, as especies que nadan e se alimentan en espacios acuáticos, como as pardelas, as anátidas ou as gaivotas, por citar algunhas, poden quedar enganchadas nos plásticos e, como non poden soltarse e voar, en moitos casos morren por hipotermia ou afogan. En terceiro lugar, as aves que bucean para alimentarse tamén quedan atrapadas no lixo e nos restos de redes que están á deriva, e afogan".

"O 70% dos cachalotes ou cifios que aparecen varados teñen plástico nos seus sistemas dixestivos"

Aunque es difícil dar cifras concretas, "estímase que cada ano morren a nivel global máis dun millón de aves por culpa dos plásticos no mar e nas zonas acuáticas", dice el mismo portavoz.

Pero no solo los animales están expuestos a la cantidad de basura no orgánica que flota en los océanos. En los últimos años han proliferado los estudios que demuestran que se han detectado microplásticos en peces que consumen las personas.

A pesar de ello, los residuos que generan los humanos siguen llegando por toneladas al mar, tal y como se aprecia estos días en muchos puntos de la ría de Pontevedra y de otras rías gallegas.

RESPONSABILIDAD DE TODOS. Desde colectivos ecologistas como Adega apuntan que "cada vez hai máis xente concienciada e responsable ante esta situación, pero segue habendo moita que non é consciente das consecuencias dos seus actos".

Así lo afirma Itziar Díaz, educadora ambiental de la Asociación para a Defensa Ecolóxica de Galiza, entidad que cada año organiza limpiezas simultáneas de playas en el mes de octubre, antes de que empiecen los temporales, para evitar que la basura vertida en los arenales durante el verano acabe en el mar.

Aún así, Itziar Día señala que en todo el litoral gallego "hai praias que son auténticos puntos vermellos no que se refire á cantidade de lixo, sobre todo de plásticos, que se atopa nelas"; y esa basura "acaba no mar: enterrada no fondo, flotando entre as correntes ou na superficie".

Toda esa porquería la arroja la inmensa mayoría de la población, a veces sin ser totalmente consciente de ello, y el problema se acentúa aún más por una gestión inadecuada de los residuos.

"Poñer e usar nas praias ou nos espazos naturais papeleiras abertas, sen tapa, non ten sentido en Galicia, porque a maioría do lixo que se xera son obxectos lixeiros que voan co vento e acaban esparexidos pola area e o mar. Pero colocar contedores en todos os espazos naturais tampouco é a solución, porque requiren unha xestión e un transporte que tamén contamina", apunta la misma portavoz, quien añade que lo más idóneo es la autogestión: "Que cada persoa leve o lixo que xera e o deposite no colector axeitado. Hai que incidir na conciencia individual. Todos somos responsables".

Además de los restos que los usuarios de las playas dejan en ellas, también están los que se arrojan al mar desde las embarcaciones ("sobre todo desde os cruceiros e demais barcos de recreo") y también en los chiringuitos, desde donde vuelan servilletas, pajitas, tapones de botellas, bricks y otros muchos objetos que quedan sembrados por la arena. Este mismo verano, varios ciudadanos denunciaron públicamente la cantidad de basura que quedó en la playa de Areas (Sanxenxo) tras la retirada del chiringuito. Pero es solo un ejemplo entre tantos que se podrían poner.

Organizan para mañana una limpieza voluntaria del litoral en Poio

La terrible imagen que ofrecen algunos puntos de la costa de la ría de Pontevedra, como la playa de Lourido (en Poio), tras el paso de los temporales ha ayudado a despertar la conciencia ciudadana. El Concello poiense lleva días retirando con maquinaria y operarios los restos acumulados por las mareas en arenales como el de Cabeceira, pero algunas personas han decidido ayudar con sus propias manos a recoger la basura de origen humano. Tom Glendenning, un ciudadano inglés que lleva dos años afincado en Pontevedra, está detrás de una convocatoria para mañana, sábado, en la playa de Campelo y los demás arenales de la zona. Se realizará de 11.00 a 13.00 horas y está abierta a todas las personas que quieran participar. Es recomendable llevar guantes, bolsas, botas y un chubasquero en caso de que llueva. "Hace unos días fui a pasear por allí y me quedé asustado, así que, como llevaba tiempo pensando en hacer algo así, decidí organizar esta limpieza y contribuir a retirar toda esa basura. Por eso lancé esta convocatoria a través de las redes sociales", explica el promotor de la iniciativa.