Juan Carlos I, con su familia en Sanxenxo, pero sin Felipe VI: "Estoy muy contento"

El rey emérito salió a navegar este jueves con su hermana, la Infanta Margarita, sus sobrinos, Alfonso y María Zurita, y su ahijado, el pequeño Carlos ▶ Al llegar del mar, rompió su silencio a las puertas del Náutico, donde comió con sus allegados, asegurando que, "seguramente" vería a Felipe VI en Galicia, si bien no trascendió ninguna parada del Rey en Sanxenxo
Juan Carlos I en el mediodía de este jueves a las puertas del Náutico. ANXO LORENZO
photo_camera Juan Carlos I en el mediodía de este jueves a las puertas del Náutico. ANXO LORENZO

Cambio repentino de guión en el entorno de Juan Carlos I durante su estancia en Sanxenxo, donde este jueves, lejos de mantener el prometido perfil bajo, el rey emérito pudo resarcirse de sus anteriores visitas al municipio y de las últimas jornadas, haciendo por fin lo que más le gusta: navegar y comer en el Náutico, incluso ante la mirada atenta de la prensa, a la que, en esta ocasión, no le importó dirigirse para asegurar que se encuentra "muy bien" y que está "muy contento" con la visita de sus allegados.

Así, sin más, y a las puertas del Club, donde después le esperaba una comida, rompió el silencio que mantenía desde su llegada a Sanxenxo el pasado lunes, previo posado cerca del cartel oficial de la regata Rey Juan Carlos I, que disputará desde esta tarde en el municipio. Allí acudió para comer junto a su familia, con la que protagonizó por la mañana la estampa familiar pública más entrañable desde su marcha a Abu Dabi. Y no le faltó calor. Durante la tarde del miércoles se daba a conocer la llegada de su hermana, la Infanta Margarita, que hacía entonces su entrada en el chalé de Pedro Campos en Nanín a bordo de un vehículo, para visitar al rey emérito. Pero la Infanta Margarita preveía traer consigo a toda la familia. Y así lo hizo.

El rey emérito navega en Sanxenxo junto a su familia. EFE
El rey emérito navega en Sanxenxo junto a su familia. EFE

Pasadas las 11.30 horas de ayer, en el pantalán del Náutico de Sanxenxo, Juan Carlos I reaparecía después de 48 horas sin salir del chalé de Campos saludando a los medios para, contra todo pronóstico, subirse a la embarcación auxiliar ‘Cristina’, en vez de al ‘Bribón’, como estaba previsto inicialmente. A bordo de la lancha, le acompañaron, para sorpresa de todos los allí presentes, la propia Infanta Margarita junto a sus dos hijos y sobrinos del rey emérito, Alfonso y María Zurita quien, además de lucir una sudadera del Náutico de Sanxenxo, despertó la curiosidad de muchos de los vecinos y visitantes que se encontraban en el entorno del Náutico, y que la conocen, sobre todo, por su participación en Master Chef Celebrity. La nota entrañable la puso el hijo de esta última, que a su vez es sobrino nieto y ahijado del rey emérito, el pequeño Carlos, quien también viajó a Sanxenxo junto a su madre para reencontrarse con su padrino, con el que ambos mantienen una relación muy estrecha y en constante contacto, tal y como declaró la propia María Zurita en anteriores ocasiones. En el pantalán, el propio Juan Carlos I y el pequeño Carlos protagonizaron divertidos momentos, en los que el padrino daba todo tipo de indicaciones al niño para que explorase el Bribón, amarrado junto a la lancha auxiliar. 

La Infanta Margarita, tras desembarcar en el pantalán. ANXO LORENZO
La Infanta Margarita, tras desembarcar en el pantalán. ANXO LORENZO

Un beso del pequeño en la mejilla del rey emérito acabó por enternecer a los espectadores que observaban desde lo alto del espigón, y que no dudaron en aplaudir a la llegada de Juan Carlos I, animándole en su descenso por la escalinata del pantalán, que realizó con cierta dificultad debido a sus problemas de movilidad.

Aunque el pequeño Carlos acaparó todas las miradas en el pantalán, otro de los momentos más sorpresivos fue el embarque de la Infanta Margarita, mediante una pequeña grúa que la elevó directamente desde el pantalán hasta la auxiliar ‘Cristina’. En la lancha, además, se encontraba el amigo del rey emérito  y presidente del Náutico, Pedro Campos, que le acompaña infatigablemente durante sus estancias en Sanxenxo, así como su mujer, Cristina Franze. Ambos se unieron a la familia durante toda la travesía, junto a otros miembros de la tripulación.

Alfonso y María Zurita acapararon varias miradas curiosas. ANXO LORENZO
Alfonso y María Zurita acapararon varias miradas curiosas. ANXO LORENZO

Dos horas escasas después de hacer un pequeño tour por la ría, la lancha regresaba a puerto, haciendo dos paradas. La primera, en el pantalán más próximo al Náutico, para facilitar el desembarque de la Infanta Margarita y del resto de la familia, que inmediatamente accedió al interior del edificio del Náutico. Más tarde, después de apearse varios metros más lejos, en su pantalán habitual ubicado en la punta del espigón, Juan Carlos I se reunió con ellos tras recorrer el tramo que separa el pantalán del edificio en coche. Allí mismo se bajó del vehículo, ante los medios de comunicación que seguían sus inusuales movimientos en esta jornada, para reunirse  con sus familiares y allegados en el interior del edificio y pasar las próximas horas disfrutando de una comida que se alargó hasta alrededor de las 18.00 horas de la tarde. Por el salón del Náutico, a pesar del carácter privado de la cita, desfilaron todo tipo de personalidades, entre deportistas del mundo de la vela y conocidos de Juan Carlos I que se encuentran en estos momentos en Sanxenxo, con los que compartió cafés y conversaciones rodeado de su familia.

La sombra de Felipe VI

Mientras, ajenos a todo, los Borbón disfrutaban de la cocina del Náutico, la pregunta que durante toda la jornada había estado en el aire se hacía más fuerte. ¿Habría encuentro entre Juan Carlos I y Felipe VI? Este último, había llegado a Galicia para inaugurar el Foro La Toja inusualmente temprano, sobre las 11.30 horas, mientras su padre se encontraba embarcando para salir a navegar. A alimentar el rumor contribuyó, precisamente, el propio rey emérito, quien no dudó en afirmar ante los periodistas a las puertas del Náutico que "seguramente" podría ver a su hijo en Galicia. 

Pero el esperado encuentro, no llegó a producirse, sin que trascendiera ninguna parada del Rey en Sanxenxo. De hecho, fuentes consultadas por Diario de Pontevedra apuntan a que Felipe VI se dirigió directamente al aeropuerto de Peinador tras su participación en el foro que se desarrollaba en esos momentos en A Toxa, con el establecimiento del pertinente dispositivo de seguridad de cara a su despegue desde el aeropuerto vigués a media tarde.

Quien sí se espera que en las próximas horas haga acto de presencia para acompañar a su padre en el municipio es la Infanta Elena, que estará en las regatas, en las que también participó activamente durante la anterior estancia de Juan Carlos I en el municipio, a finales del pasado julio.

Se prevé que el rey emérito, que canceló sus planes de entrenamiento ayer para navegar con su familia, participe también durante la tarde de hoy patroneando el Bribón, y que asista a la cena programada en el Náutico.