El puerto deportivo acogió 452 embarcaciones con 20 banderas direrentes en 2022

La empresa municipal ingresó más de 2 millones de euros durante el pasado año

Puerto deportivo de Sanxenxo. JOSÉ LUIZ OUBIÑA
photo_camera Puerto deportivo de Sanxenxo. JOSÉ LUIZ OUBIÑA

Un total de 452 embarcaciones de hasta 20 países diferentes recalaron en el puerto deportivo Juan Carlos I en 2022. La mayoría de las embarcaciones procedían del territorio nacional (258), seguidas de Francia (43), Irlanda (37), Portugal (24) y Gran Bretaña (15), pero también hicieron escala en Sanxenxo barcos con bandera de Namibia, Finlandia, Sudáfrica, Polonia, Estados Unidos, Bélgica, Suiza, Dinamarca, Islandia, Holanda, Noruega, Suecia y Eslovenia.

La mayoría de las embarcaciones fueron veleros (324) frente a los de motor (128). Nauta Sanxenxo continúa percibiendo el interés creciente por el alquiler de amarres para todo el año, especialmente de barcos de eslora de más de 18 metros, es decir, yates ya de una cierta envergadura y tamaño, aunque siguen siendo más numerosos los alquileres de barcos con hasta 12 y 15 metros.

El puerto deportivo del municipio cuenta con una superficie concesional total de 123.222 metros cuadrados. Sus instalaciones comprenden una lámina de agua de 90.000 metros cuadrados, 450 puntos de amarre y más de 25.000 metros cuadrados de espacio peatonal. A los amarres correspondientes al alquiler estival y los que son de carácter anual fijo se suman las concesiones y los amarres variables para el tránsito de embarcaciones.

En cuanto a los ingresos, Nauta Sanxenxo obtuvo una facturación de 2.020.527 euros en distintos conceptos como mantenimiento plazas de amarre, tránsitos, combustible, parking, grúa o varadero, entre otros. Una cifra que constata la recuperación de la actividad con datos similares a los de antes de la pandemia.

Cabe recordar que la actual concesión de Portos de Galicia vence en el 2027 y su ampliación hasta 2047 permitirá consolidar el puerto sanxenxino como un referente en la entrada de la ría de Pontevedra. Esta prórroga de la concesión está vinculada a una serie de proyectos que redundarán en la mejora de la fachada marítima como son el proyecto Batea en Tierra y la reordenación de la lámina de agua, sin suponer ningún coste para las arcas municipales.