La reforma integral de la Praza Pública de Vilalonga avanza a buen ritmo a pesar de las últimas lluvias, y aborda ya la estructura del graderío con el que contará el nuevo espacio y la construcción del bordillo perimetral. En los próximos días, se espera que dé comienzo la pavimentación de la plaza, que pasará de 4.011 metros cuadrados a 5.280.
La obra, que supondrá humanizar definitivamente el entorno, es una de las seis actuaciones activas en estos momentos en el municipio, junto con el boulevard de Portonovo, el pabellón de Baltar, la senda de Dorrón, la mejora de seguridad vial de la PO-504 y la puesta a punto de los parques infantiles. En los próximos días, además, el Concello prevé que se adjudique la mejora de la Praza do Pazo.
En el caso de la Praza Pública de Vilalonga, incluirá la reforma del palco y del bar dentro del mismo proyecto. De este modo, el bar pasará a dar servicio a toda la plaza, más allá del campo de fútbol. También se eliminará el tráfico rodado en la plaza, aunque se mantendrá el acceso de servicio al campo de fútbol. El espacio se convertirá en una zona versátil con aceras amplias en el lado de la plaza y en el opuesto, y se propondrá la limitación de 20 km/h en el tramo de la PO-505.
Para potenciar la zona infantil, se suprimirán las barreras físicas existentes, así como el vallado perimetral, que perjudica el acceso a la plaza y también se construirá una grada con una pérgola de estructura de acero galvanizado, cuyos pilares seguirán la línea de los troncos de abedul, con el objetivo de habilitar la realización de eventos culturales y deportivos con sombra durante el verano.
En el caso del campo de fútbol, se mejorarán los accesos y se plantarán abedules para hacer de barrera entre la carretera y la plaza. Tras la obra, la plaza incluirá tres necesidades como son la zona infantil, una zona para realizar pequeños eventos y otra para eventos mayores. La obra tiene un coste de 908.564 euros (IVA incluido) y está siendo ejecutada por EC Casas, que ofreció una garantía de cuatro años.
