Ni procesión marítima ni verbena. Así puso fin este lunes Sanxenxo a varios días de fiestas, en una jornada dedicada a la Virgen del Carmen que estuvo marcada por las precipitaciones intermitentes, obligando al Gobierno local a suspender la programación ya desde primera hora de la mañana. A pesar de ello, vecinos y devotos sí pudieron conservar la ofrenda floral dedicada a los marineros fallecidos, que tuvo que trasladarse al Templo Nuevo durante la tarde, teniendo en cuenta las previsiones meteorológicas, y que constituyó el acto central del día.
Decenas de vecinos y devotos acompañaron a la Virgen del Carmen en el interior y en el exterior del templo, en una misa cantada por el Coro Parroquial San Xinés de Padriñán y oficiada por el arzobispo de Santiago, Julián Barrio.

A falta de los tradicionales actos marítimos, a la celebración litúrgica le siguió una pequeña marcha en la que la imagen de la santa pudo procesionar alrededor del templo a hombros de los fieles, aprovechando una tregua de las precipitaciones.
HOMENAJE. Ya en el interior del Templo Nuevo, los asistentes pudieron depositar flores en recuerdo a los marineros fallecidos, en un emotivo acto en el que estuvieron presentes varias autoridades como el alcalde, Telmo Martín, y la teniente de alcalde, María Deza.
La verbena en la Praza do Mar, en la que estaba previsto que actuasen las orquestas Olympus y La Ola ADN, quedó suspendida, al igual que las actuaciones de la Banda de Música de Sanxenxo previstas para la jornada del lunes. A pesar de las suspensiones, vecinos y visitantes pudieron participar este fin de semana en una exitosa Feira da Cebola que contó con cientos de asistentes en la localización alternativa del parking de Nauta.
El Gobierno local anunció durante la tarde del lunes a través de sus redes sociales que ya trabaja en la búsqueda de nuevas fechas para recuperar la programación suspendida.