Una despedida victoriosa para el emérito

▶ Juan Carlos I abandonó este domingo Sanxenxo con destino a Ginebra después de patronear el Bribón en la segunda jornada de la regata, en la que se llevó el oro ▶ Su entorno prevé que regrese el próximo mes de abril, al menos durante una semana

Juan Carlos I, este domingo cuando abandonó Nanín en dirección al aeropuerto de Peinador. EUROPA PRESS
photo_camera Juan Carlos I, este domingo cuando abandonó Nanín en dirección al aeropuerto de Peinador. EUROPA PRESS

Tras 24 horas ausente del entorno del Real Club Náutico de Sanxenxo, Juan Carlos I reapareció este domingo con energías renovadas para afrontar la segunda jornada de la regata de la clase 6m en la que compite la embarcación de la que es patrón, el Bribón. Lo hizo, ahora sí, a los mandos del velero, sonriente, y animado en todo momento a saludar y conversar con todos aquellos -sobre todo allegados y miembros de las distintas tripulaciones participantes en las pruebas- que se le acercaron en el pantalán del Náutico durante la mañana, minutos antes de comenzar la prueba deportiva, que dio el bocinazo de salida en torno a las 12.30 horas.

El rey emérito compartió momentos con sus allegados durante su estancia en Sanxenxo. JOSÉ LUIZ OUBIÑA
El rey emérito compartió momentos con sus allegados durante su estancia en Sanxenxo. JOSÉ LUIZ OUBIÑA

Dos horas en el mar después y sabiéndose ganador del oro, el rey emérito regresó a su cuartel general en Sanxenxo, la casa que el presidente del Náutico, Pedro Campos, tiene en Nanín, para disponer los últimos preparativos de su marcha, en un viaje que emprendió pasadas las 16.10 horas, cuando abandonó el chalé saludando a los medios, para dirigirse al aeropuerto de Peinador donde esta vez tomó un avión privado rumbo a Ginebra, ciudad en la que reside su hija mediana, la infanta Cristina. Allí podría permanecer, al menos, hasta que regrese a Sanxenxo el próximo mes de abril, sin que trascendiera, por el momento, en qué momento volverá a Abu Dabi (Emiratos Árabes Unidos) o si llegará a hacerlo.

Cabe recordar que el rey emérito tiene intención de trasladarse a Sanxenxo periódicamente, para participar en todas las regatas de la clase 6m del año. La próxima cita deportiva a la que acudirá Juan Carlos I en el municipio abarcará los días 20 y 21 de abril, si bien su entorno prevé que permanezca en el municipio al menos durante una semana en esas fechas, incluyendo los días en los que se disputen las pruebas, en las que se espera que vuelva a figurar inscrito como patrón del Bribón.

SU SEGUNDA CASA. Sanxenxo ya no es un lugar circunstancial para el rey emérito, sino una especie de segundo hogar al que volver y en el que siempre está rodeado de amigos cercanos. Si bien en esta última visita estuvo ausente su hermana, la infanta Margarita, junto a los Zurita, que habían acaparado parte del protagonismo en las últimas estancias del emérito en Sanxenxo, quien no faltó a la cita fue la infanta Elena, que no tardó ni un día en reunirse con su padre en el municipio, al que este había llegado el pasado miércoles, previo chequeo médico en Vitoria.

Juan Carlos I patroneando el Bribón este domingo. JOSÉ LUIZ OUBIÑA
Juan Carlos I patroneando el Bribón este domingo. JOSÉ LUIZ OUBIÑA

Sus anfitriones, Pedro Campos y su mujer, Cristina Franze, acompañaron también a Juan Carlos I en sus actividades durante la estancia, centradas en la vela y en la gastronomía, con una cena a base de marisco que tuvo lugar en la noche del viernes en el restaurante Ribadomar de Cambados, y que despertó un gran revuelo entre el vecindario de la zona. En el entorno del Náutico, además, se dejó ver Inés Muiños, amiga íntima del emérito y mujer del empresario y armador catalán Josep Cusí, que se desplazó al municipio para poder verle y compartir con la infanta la jornada de navegación del viernes. Mauricio Sánchez-Bella y Alicia Freire, del velero Titia y amigos de Juan Carlos I, así como miembros de la tripulación del Bribón como Jane Abascal, fueron de los más próximos al rey emérito estos días.