El centro de salud de Ribadumia late con fuerza. Su actividad riega todos los rincones del municipio. Aquí todos saben que este centro es más que un lugar al que acudir cuando uno está enfermo, tiene que ponerse una vacuna o recoger recetas. Desde hace años el equipo de profesionales que dan vida a las instalaciones de Cruceiro Vello organizan actividades que tienen por objetivo implicar a los habitantes en el cuidado de su salud.
"Tenemos una población maravillosa, porque organizas cosas y siempre asisten y ves que vale la pena", explica Bea Crespo, enfermera en el centro de salud de Ribadumia y una de las impulsoras de las propuestas del centro. Todo el equipo está implicado, asegura. En total, tres médicas, tres enfermeras y dos PSX. Los miércoles además cuentan con una pediatra y una enfermera de Pediatría a mayores. "La actividad comunitaria es una de las funciones fundamentales de Primaria. El paciente te tiene como un amigo para poder acudir y además mejoras mucho la salud de la población, que es a lo que vamos", dice Bea.
Así, el Día de la Día de la Hipertensión el centro de salud acogió una charla sobre cómo cuidar el corazón. Después, las enfermeras tomaron la tensión a todos los vecinos y vecinas que asistieron y se fueron a casa con algunas recomendaciones para mejorar su salud. El Día de la Obesidad organizan talleres en el colegio sobre alimentación saludable. Hace un mes celebraron una charla sobre enfermedades de transmisión sexual y este miércoles conmemoraron el Día de la Salud Física con una marcha.
Las impulsoras de esta andaina llevan varios años organizándola y siempre con gran éxito. En esta ocasión la caminata, a la que se sumaron más de setenta personas, tuvo que acortarse a causa del mal tiempo.
En su lugar, los participantes se trasladaron hasta el Pabellón de Deportes Municipal para vivir una jornada de intensa actividad física. "El Concello nos cedió el pabellón y terminamos haciendo ejercicios de fuerza con bandas elásticas con el entrenador personal Samuel Fariña y la profesora de gimnasia Iria Pazos", cuenta Bea Crespo.
"Para trabajar la salud tenemos que hacer ejercicio y establecer unas pautas en nuestro día a día", señala. "Quedarse sentado no puede ser una opción. Si queremos ser mayores válidos tenemos que cultivar el cuerpo desde ya".
Los participantes además recibieron algunas nociones sobre estiramiento y consejos para adquirir hábitos saludables.
Con el colegio
Con motivo del Día de la Obesidad este equipo de sanitarias, en colaboración con la dirección del colegio de Ribadumia, realiza cada año unos talleres con el alumnado de Educación Infantil. "Los niños hacen un menú, con frutos verduras... y después vamos a la pirámide nutricional y les explicamos los nutrientes que tienen, etc. Por ejemplo, les enseñamos la cantidad de azucarillos que contiene un refresco de Cola", cuenta la enfermera, que destaca que a través de la experimentación logran atrapar la atención de pequeños y mayores sobre los cuidados.
El Día de la Higiene de Manos también fueron al colegio y enseñaron a los niños y niñas a lavarse las manos. "Llevamos unos polvos translúcidos y con una linterna translúcida les enseñamos los restos de suciedad que quedan cuando uno no se lava bien las manos. ¡Imagínate la cantidad de microorganismos que pueden tener!".
Para abordar la diabetes también llevaron alimentos al centro educativo y explicaron cuáles de ellos contienen azúcar. "Siempre invitamos a un paciente a narrar su experiencia", indica Bea.
