El turismo rompe el listón de los 3.000 millones de ingresos en las Rías Baixas

La patronal Exceltur confirma un crecimiento del 23,4% el pasado ejercicio respecto a 2019 gracias al impulso del Camino de Santiago, la prolongación de la temporada de playa por el buen clima y el avance de la desestacionalización

 El buen comportamiento del clima hizo posible mejorar las previsiones en 2023 para los principales destinos de las Rías Baixas, como ocurrió en Sanxenxo. JAVIER CERVERA-MERCADILLO
photo_camera El buen comportamiento del clima hizo posible mejorar las previsiones en 2023 para los principales destinos de las Rías Baixas, como ocurrió en Sanxenxo. JAVIER CERVERA-MERCADILLO

El sector turístico tenía un reto en las Rías Baixas el pasado 2023: superar los datos de 2019, el último ejercicio de gran éxito antes de la pandemia, y rebasar por vez primera la barrera de los 3.000 millones de facturación en la provincia. Los objetivos no solo se han cumplido, sino que superaron todas las expectativas.

Los ingresos generados en las Rías Baixas se han disparado un 23,4% en relación a los datos de 2019, han dejado atrás el listón de los 3.000 millones de euros y han duplicado las previsiones oficiales, que hablaban de un crecimiento esperado del 6,7%.

Exceltur, la patronal del sector, presentó esta semana su informe anual y cifró la generación de ingresos del turismo en España por encima de los 186.596 millones de euros, lo que elevaría la contribución a la economía española hasta el 12,8%, un máximo histórico, ya que hasta ahora el peso del turismo en la economía nacional no había superado el 12,6 alcanzado en 2019. El buen momento del sector el pasado año provocó que casi ocho de cada cien euros anotados a la recuperación económica del país proviniesen directamente de este ramo de actividad.

Las Rías Baixas, como muchos de los destinos marcados por el sol y la playa, han sido los verdaderos motores de esos buenos datos con aumentos de facturación inesperados. El tirón del Camino de Santiago, que sigue batiendo año a año sus mejores marcas, unido a la prolongación de la temporada de playa por la buena climatología, tienen la culpa de este ascenso, que también guarda cada vez más relación con la estrategia de desestacionalización desarrollada por las principales empresas del sector y apoyada desde las administraciones públicas.

El ejercicio de 2022 se había cerrado con una facturación turística en la provincia próxima a los 2.800 millones de euros, sensiblemente por encima de los 2.564 millones con los que el sector cerró el año 2019. Entonces, el PIB de la provincia mantenía 21.637 millones de euros al cierre de la contabilidad anual, lo que le aportaba un peso al turismo del 12% en el cómputo global. Ahora las estimaciones hablan ya de porcentajes muy próximos al 12,8%

Galicia batió su récord de turistas en 2022 con un total de 6,5 millones de viajeros y 12,5 millones de pernoctaciones. Un año de cierre del bienio Xacobeo que supuso también la mayor cifra de Compostelas entregadas: 438.682. Este dato de peregrinos fue un 26% superior al récord de 350.000 logrado en 2019.

En la provincia de Pontevedra, los datos del año pasado son todavía más contundentes. En 2023 llegaron algo más de dos millones de turistas, mientras que el número de peregrinos del Camino Portugués rompió todas sus marcas y superó los 140.000 peregrinos.

El 75% de todos los turistas son españoles, mientras que el 25% restante es extranjero. En relación al años 2019, el turismo nacional ha crecido ya más de un 30% y el internacional se duplicó respecto a los niveles prepandemia.

Además, este año Pontevedra ha conseguido para sus costas un total de 58 banderas azules. Son las mismas que ya obtuviera en las dos pasadas ediciones.

Los datos demuestran una recuperación total respecto a la sacudida de la pandemia, que supuso el mayor mazazo al sector en las Rías Baixas desde la crisis del 2008.

En 2020, el año de las restricciones, los ingresos de las empresas relacionadas con el turismo en las Rías Baixas se desplomaron un 57,5% de acuerdo con las estimaciones del Observatorio turístico gallego. El dato fue igual de contundente en el resto de las zonas turísticas de la comunidad: las Rías Altas redujeron en 2020 su facturación un 64,7%, un 53,5% en la Mariña lucense.

Al igual que sucedió en Galicia, el resto de destinos turísticos costeros tuvieron un comportamiento muy por encima de la media de crecimiento del sector, que fue del 15%. Así, Baleares se situó un 26% por encima de los datos de 2019, Canarias creció un 23,2% respecto al mismo año, el aumento del as ventas en Andalucía fue del 18,8%, en Valencia del 16,6, y en Cataluña del 17,5. Comunidades como Madrid están hoy un 15% por delante de los datos del 2019, un aumento menor que el anotado por el País Vasco (21,1%) o por la comunidad asturiana (26,1%).

La rentabilidad de las plazas hoteleras es un 24,1% mayor que antes de la pandemia

La apuesta del sector por la mejora de la calidad ofrece resultados tangibles en los datos que maneja la patronal del sector, Exceltur. En su último informe sobre la actividad en 2023, cifra en un 24,1% el aumento de la rentabilidad de las plazas hoteleras en las Rías Baixas respecto a la que se venía obteniendo el último año antes de la pandemia, en 2019.

Son datos comparables a los crecimientos registrados Tenerife, Gran Canaria, Mallorca o la costa Blanca y están en la línea de mejora que confirman también otros destinos gallegos con menor afluencia turística, como la Mariña lucense, que aumenta su rentabilidad un 27% sobre los datos de 2019.

Para el 2024, Exceltur pronostica que seguirá creciendo el gasto en viajes de las familias y que mejorará la apuesta de los grandes operadores turísticos por los destinos nacionales. Además, el previsible escenario más benigno del precio del petróleo hace prever una moderación en los precios de los desplazamientos turísticos, en comparación con lo sucedido a lo largo del último año.

En destinos como el gallegos, el potencial de atracción para turistas con un creciente valor añadido es otro factor relevante.