El Concello de Vilanova volvió a firmar este lunes el convenio de colaboración que mantiene con el Banco de Alimentos Rías Baixas, con sede en Vilalonga (Sanxenxo), por un importe de 1.500 euros para atender a las familias más necesitadas de la localidad. En el acto participó la concelleira de Servicios Sociais, Ana Carballa, la presidenta de la entidad, Dora Pérez Alarcón y el alcalde, Gonzalo Durán, quien agradeció "la labor desinteresada" del colectivo, con el que también quiso comprometerse públicamente. "Es un convenio de 1.500 euros, no es mucho dinero, pero adquiero públicamente el compromiso de ampliarlo lo que sea necesario para que ninguna familia de Vilanova quede desatendida", aseguró el regidor.
Según Durán, "este año lo firmamos con una preocupación especial porque creemos que va a ser muy duro para la población. Con la subida de precios hay familias que lo están pasando muy mal y necesitan una ayuda". Sin embargo, el alcalde también quiso apelar a la tranquilidad de los vecinos. "Que la gente esté tranquila que no va a haber nadie que esté desatendido. El único peligro que veo es que no nos enteremos. Pueden acudir a nosotros a través de la concejalía, que está en un sitio discreto, Cáritas o el Banco de Alimentos. Puede venir un allegado y se lo llevamos con toda discreción, pero necesitamos que nos lo digan para poder actuar. Si los vecinos saben de algún caso que no esté atendido, que nos lo hagan saber para poder ayudar, que es nuestro deber", dijo.
Por su parte, Pérez Alarcón aseguró que "para nosotros es una ayuda importantísima, porque las necesidades aumentan. A la pandemia se une la carestía y tenemos un amplio abanico de necesidades, gente mayor que vive sola, familias con niños, gente de otros países y desgraciadamente las donaciones han disminuido y las administraciones no están muy a esto", valoró.
