El puente de Pontearnelas avanzó a una nueva fase este miércoles con el izado de las estructuras de sujeción del mismo. Se trata del día "más importante de las maniobras", ya que "se están montando las celosías metálicas", unas estructuras de 60 metros de longitud y cinco de alto cada una, con un peso de 95 toneladas, utilizando para ello dos grúas de 250 toneladas cada una, tal y como indicaba uno de los técnicos ingenieros, Sergio Couto. "Se montaron en dos trozos, cada una en el margen del río, se soldaron en obra y ahora se están colocando con las dos grúas, situadas a ambos lados del río, en tres o cuatro fases para salvar el río y montarlas en sitio". Una vez que las estructuras lleguen a su sitio, "se fijarán trasversalmente". El proceso, que inició a las 9 de la mañana, se espera que se extienda a lo largo de toda la jornada.
Se trata de una maniobra nada sencilla pues, tal y como explicó Couto, la mayor dificultad se encuentra en el terreno, "que estamos monitorizando continuamente porque estamos moi preto do río, aínda que a estrutura non debería ter problema, está todo ben estudado".
El tráfico rodado, en abril
El procedimiento a seguir una vez instaladas ambas celosías, será "soldar as bigas transversais entre as dúas estruturas, colocar unhas placas prefabricadas, meterlle o ferro e a armadura pasiva á losa e hormigonar". A partir de ahí, quedaría por completarse el pavimentado, la colocación de las barreras y ya podrían empezar a pasar los vehículos. La conselleira de Infraestruturas e Mobilidade, Ethel Vázquez presenció el inicio de las maniobras junto al delegado territorial, Agustín Reguera; el director de la Axencia de Infraestruturas, Francisco Menéndez; el alcalde de Ribadumia, David Castro, y el teniente de alcalde de Vilanova, Javier Tourís. La conselleira afirmó que, si todo va según lo previsto, el puente podría volver a estar operativo en el mes de abril.
