Un amplio despliegue operativo coordinado por la Udyco Central del Cuerpo Nacional de Policía sirvió para detener a los presuntos responsables de la introducción en las Rías Baixas de una indeterminada cantidad de cocaína en el interior del mayor narcosubmarino transoceánico jamás intervenido, el Poseidón, localizado en aguas de la ría de Arousa hace ahora poco más de un año. Durante ese tiempo, la sección Greco Galicia de la citada Udyco Central siguió los pasos de las personas que habían utilizado las embarcaciones que aparecieron en distintos puntos, entre otros, en Ribeira, poco antes del hallazgo del semisumergible.
El resultado, la caída de varias de esas personas que, presuntamente, fueron contratadas para el transporte, de las que al menos tres tienen un elemento común: su relación con José Ramón Prado Bugallo, Sito Miñanco. La Dirección Adjunta de Vigilancia Aduanera (Dava) participó de forma conjunta con la Policía a lo largo de toda la investigación.
Personal especializado
De hecho, dos de los individuos de la máxima confianza de Miñanco consiguieron eludir la acción policial, y serían dos de los principales investigados en este asunto.
Con antecedentes, uno de ellos ya se escapó durante la operación Mito, el último gran golpe al capo de Cambados, mientras que el segundo, Francisco Javier P.R., está procesado y pendiente de juicio en la misma causa de la Audiencia Nacional.
Los colombianos
Fueron identificados, además, los ciudadanos colombianos que estaban en Galicia para supervisar la recepción de la droga. Sin embargo, uno de ellos está en Sudamérica y el segundo falleció recientemente en Madrid.
La redada de este martes se desarrolló en media docena de partidos judiciales, con intervenciones en Ribeira, Noia, Caldas, A Estrada, Cambados y Vilanova de Arousa, entre otros emplazamientos. Agentes procedentes de distintas comisarías se desplegaron en los domicilios de los investigados, llegando desde primera hora de la mañana para sorprender a cada uno de los objetivos que se hallaban en la agenda de la operación policial. Así, se desplegaron especialistas de la UIP (antidisturbios) para asegurar cada uno de los movimientos de los antidroga de la Comisaría de Pontevedra, desde cuyas dependencias se gestó el grueso de la investigación. Guías caninos procedentes de A Coruña completaron el operativo.
Además de los domicilios, fueron objeto de registro parcelas, galpones y garajes, en los que se localizaron varias embarcaciones, motores y dispositivos electrónicos de gran interés para la Udyco Central, que pretendía con el operativo vincular a los investigados con las narcolanchas que salieron en busca de la cocaína del semisumergible.
Los moldes
Hallazgo especialmente destacado fueron dos moldes para la fabricación de narcolanchas localizados en la comarca de O Salnés. Uno de ellos, cortado por la zona de popa, habría servido para construir embarcaciones capaces de montar cinco motores fueraborda, pues tenía una manga muy superior al habitual. El segundo sería el clásico, de unos doce metros de eslora por tres de manga que, además, apareció acompañado de un tanque de combustible con capacidad para unos 3.000 litros.
A partir del material incautado y del interrogatorio a los detenidos, la Policía Nacional y la Dirección Adjunta de Vigilancia Aduanera (Dava), que participó de forma conjunta con la Policía a lo largo de toda la investigación, buscarán atar todos los cabos para vincular a los sospechosos con el Poseidón, así como para la localización de dos de los sospechosos, ambos relacionados policialmente con Sito Miñanco, que por el momento, como se ha dicho, no han podido ser detenidos.
De ellas se infiere que algunas de las personas detenidas el martes, en unión a otras aún por identificar, habrían salido al mar en busca del punto concreto en el que se hallaba el batiscafo en varias ocasiones, hasta conseguir su objetivo. Se les atribuyen por ello los delitos de contrabando, tráfico de drogas y pertenencia a organización criminal.