El perito que compareció en el juicio no solo confirmó que el acusado, al que se atribuye un delito de contra la Seguridad Vial en su modalidad de conducción bajo la influencia de las sustancias estupefacientes, había consumido cocaína, benzoilecgonina, MDMA (éxtasis), cocaína, ketamina y MDA (precursor del MDMA), sino que lo había hecho "entre tres y seis horas antes" de ser cazado por los agentes de la Policía Local en Vilagarcía de Arousa. Con estos argumentos, de poco sirvió el recurso interpuesto por su representación legal ante la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra, que confirmó el dictamen emitido en el Juzgado de Lo Penal 1 de A Parda, que le condena a 2.400 euros de multa y a la retirada del carné por un período de un año y tres meses, tanto para conducir turismos como ciclomotores.
Los hechos que desembocan en la sentencia tuvieron lugar a mediodía, sobre las 12.00 horas del 15 de abril de 2023, cuando el acusado, sin antecedentes penales, conducía un Peugeot 2008 que había alquilado por un vial de Vilagarcía de Arousa. El tribunal detalla en la sentencia que conducía "tras haber consumido sustancias estupefacientes que limitaban sus facultades para el correcto dominio del vehículo" y que, "por conducir en tal estado, el acusado realizaba movimientos bruscos y correcciones de trayectoria injustificadas, hecho que fue presenciado por agentes de Policía Local".
Cuando le dieron el alto, los policías detectaron, además, que el investigado presentaba síntomas tales como "tics, estaba sudoroso, se rascaba continuamente, esnifaba, no tenía percepción de la distancia".
Por todo ello, los funcionarios tomaron una muestra de saliva que fue remitida al Servicio de Toxicología de la Universidade de Santiago de Compostela y, una vez analizada, arrojó el citado resultado positivo a las sustancias mencionadas.
El investigado aún podrá presentar un nuevo recurso, ahora ante el Tribunal Supremo.
