Sanxenxo recibe tres ofertas para la reforma del auditorio, valorada en 1,8 millones

Se mejorará la accesibilidad y se paliarán las deficiencias energéticas ▶ El Pazo fue construido en 2002 y es el mayor equipamiento cultural
Exterior del Pazo Emilia Pardo Bazán, que acogerá la formación. DS
photo_camera Exterior del Auditorio Emilia Pardo Bazán. DS

El Auditorio Emilia Pardo Bazán de Sanxenxo está más cerca de su lavado de cara. La obra, que supondrá actualizar de forma integral el edificio, tanto en el interior como en el exterior, ya cuenta con tres empresas interesadas en ejecutarla, por un importe de licitación de 1,8 millones de euros.

Las entidades interesadas son Construcciones Castro Figueiro, Oreco Balgón, la misma entidad que actualmente ejecuta la primera fase del proyecto Batea en Tierra en la Praza dos Barcos, y la UTE Centro das Artes Emilia Pardo Bazán, formada por Construcciones Ramírez y Obras y Servicios Gómez Crespo. Una vez que los técnicos municipales terminen de valorar las ofertas y se acuerde cual se ajusta más a los criterios técnicos y económicos del pliego de condiciones, se propondrá para adjudicación a una de estas entidades que, una vez aprobada la adjudicación definitiva en Pleno, tendrán seis meses para concluir la obra.

Se trata, junto con el proyecto Batea en Tierra, y el futuro Mercado de Sanxenxo que encara la fase de soterramiento del túnel, calado del municipio, entre las que se encuentran en ejecución, adjudicadas, o en proceso de adjudicación.

Para llevarla a cabo, el Concello cuenta con una subvención de 1.479.000 euros procedente del programa de ayudas para rehabilitación de patrimonio público que forma parte del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, mientras que la cuantía restante procede de fondos municipales.

EL PROYECTO. El edificio, que fue construido en el año 2002, presenta actualmente importantes deficiencias energéticas, lumínicas y térmicas, y también limitaciones de accesibilidad. Por este motivo, algunos de los objetivos del proyecto es mejorar la iluminación, mejorar el patio de butacas, la climatización, cambiar la cubierta, y llevar a cabo diferentes mejoras tecnológicas para «ayudar a convertirlo en un edificio eficiente», según explicaron desde el Gobierno local. Además de esto, aunque se procurará mantener la esencia del edificio, también se revisará la cara exterior de la fachada, las terrazas y los patios exteriores y su mantenimiento.

El Pazo es el equipamiento público que concentra un mayor volumen de departamentos culturales y educativos en el municipio, como son la Biblioteca, la Escuela de Música Municipal, el Centro de Arte o el área de Animación Sociocultural.

Por su parte, la biblioteca, las salas de ensayo y la sala de música se aislarán debidamente para ampliar la funcionalidad de estos espacios, mientras que en el plano exterior también se mejorará la accesibilidad desde el casco urbano, con estaciones de recarga de coche eléctrico y aparcamientos para bicicletas y patinetes.