Hasta 256 fue el total de licencias de obra mayor tramitadas por la Concellería de Urbanismo de Sanxenxo, que dirige María Deza, el pasado año 2023. Aunque las licencias cursadas son 16 menos que en el año anterior, cuando se registraron 272, este dato, junto al volumen de expedientes y comunicaciones registrados, supone para el municipio confirmar el mantenimiento de su desarrollo urbanístico.
De este modo, el pasado año se tramitaron 1.066 expedientes y 528 comunicaciones previas, mientras que en 2022 alcanzaron las cifras de 1.177 y 587, respectivamente.
A estos datos hay que añadir el hecho de que el pasado 2023 fue el año en el que el Concello procedió a la reactivación de los suelos urbanizables suspendidos en 2017, coincidiendo con la llegada de Telmo Martín a la Alcaldía, y que ahora el Gobierno local retoma tras adaptarlos a la nueva realidad urbanística del municipio, reduciendo su edificabilidad y ampliando los espacios y zonas verdes. En este sentido, el aumento de la actividad de planeamiento y desarrollo, que verá sus frutos próximamente, deja un escenario estable, tanto en la actualidad como en el futuro, para el pulso urbanístico de Sanxenxo.
Un millón recaudado
Las cifras económicas en el departamento de Tesorería y Recaudación municipal dejan también un escenario positivo al cabo del año en el municipio, en el que la liquidación del Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO) supuso una recaudación de 1,1 millón de euros.
Según valoraron desde el Gobierno local, este crecimiento va parejo al aumento de población que roza ya los 18.000 habitantes, según los últimos datos manejados por el padrón municipal, así como al interés por adquirir una vivienda en Sanxenxo. Los datos de la auditoría realizada dentro de la elaboración de la Agenda Urbana 2030, muestran, en este sentido, que Sanxenxo se está convirtiendo en un punto de atracción como lugar de residencia durante los meses no solo de verano, sino también otoño e invierno.
Así, el estudio contabiliza que el 37% de la población es originaria de otro territorio y el 12% de fuera de Galicia. Estos datos coinciden, tal y como aseguraron desde el Concello, con las cifras del estudio Big Data encargado por la Mancomunidade do Salnés, que contabiliza 2.000 personas más residiendo en el municipio como propietarias de segundas viviendas con respecto a la cifra oficial, durante el mes con menos incremento de la población que se utilizó en el estudio. Se trata de un comportamiento, según explicaron desde el Gobierno local, que ya se había detectado durante la pandemia a partir de las atenciones a desplazados prestadas en el centro de salud de Baltar en este período.
