No es fácil afrontar el diagnóstico de un familiar, y pocas personas son las que, tras el golpe, consiguen sacar fuerzas para luchar por cambiar la situación de las personas que han pasado por lo mismo, más allá de pelear por su propia familia.
Este, sin embargo, es el caso de los Ferreira Pintos quienes, tras vivir dentro de su propia casa un diagnóstico de cáncer, decidieron poner todos los medios a su alcance para intentar paliar la situación que afrontan cada año en España alrededor de mil niños.
Conscientes de las limitaciones económicas con las que cuentan los hospitales, la gerente del bar portonovés ‘El Puente’, Carmen Ferreira, se puso en contacto con la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC), para poder unir fuerzas contra un enemigo común: el cáncer infantil. Durante lo que duraron las festividades del Carmen en la villa marinera, todos los ingresos del establecimiento, de forma íntegra, se destinaron a la investigación de esta enfermedad.
Desde ‘El Puente’ creían, al principio, que esta iniciativa no tendría mucha repercusión y que quedaría en el olvido, como tantas otras, pero, como reconoció Carmen, 'Se nos fue totalmente de las manos, es precioso todo lo que sucedió'. Además de todas las recaudaciones del bar, se incluyeron donaciones con las que se realizaron rifas y sorteos. De la facturación de ese día, juntando ‘bizums’ solidarios, se reunieron alrededor de 4.700 euros, pero la cifra total ascendió hasta los 12.967,87 euros después de que desde la AECC acudieran a romper las huchas que se colocaron en el local, junto a los donativos por parte del Concello. No todo es oscuridad cuando un familiar enferma y la iniciativa del bar ‘El Puente’ es el perfecto ejemplo de superación que ha inspirado a vecinos y a turistas.
