Un total de 586 es la cifra de picaduras de faneca brava que han tenido que atender en menos de dos semanas los profesionales de la entidad Salvar, Formar y Socorrer S.L, que ostenta la concesión del servicio de salvamento y socorrismo de los arenales de Sanxenxo, un dato que va al alza en comparación con el año anterior, en el que el cómputo total de las picaduras registradas durante toda la temporada estival se saldó en 840 desde el 26 de junio hasta el 31 de agosto.
Sin embargo, los datos de picaduras registrados por la entidad, contabilizados desde el 1 de julio hasta el pasado día 12, indican un aumento exponencial en este sentido que, tal y como explica el director del servicio, Juan Rivas, está directamente vinculado a las altas temperaturas, así como al aumento de la afluencia a los arenales sanxenxinos.
El servicio de socorrismo registró también, en los últimos días, un aumento de intervenciones por desmayos o mareos en las playas de Sanxenxo que, con la ola de calor, "se están produciendo más veces de lo que era habitual durante los últimos veranos". Por este motivo, advierte Rivas, "mucha de la gente que se marea es porque, de manera descuidada y en plena ola de calor, baja a las playa sin desayunar o sin una botella de agua". En este sentido, indica, los desmayos han sido también muy frecuentes en los últimos días "en la franja de edad de a partir de 60 años, que sufre más el calor y se le baja la tensión al estar en la playa al sol". Según los datos del servicio de salvamento, desde el 1 de julio en las playas de Sanxenxo se ha producido una insuficiencia respiratoria, siete insolaciones o golpes de calor y una lipotimia con pérdida de consciencia.
SIN CONTRATIEMPOS. A pesar de la proliferación de picaduras de faneca brava y desmayos, desde la entidad valoran el arranque de la temporada en el municipio, que este año se ha adelantado, como "dentro de lo esperado, sin percances alarmantes", salvo "algún golpe que entra dentro de lo normal, como luxaciones de hombro o daños en los pies".
En este sentido, desde la entidad esperan un "buen verano" en los 17 arenales sanxenxinos, que supervisa una plantilla de 46 efectivos con más material a su disposición que en años anteriores.
Las altas temperaturas y la marea baja
Desde la entidad Salvar, Formar y Socorrer, Juan Rivas explica que el aumento exponencial de picaduras de faneca brava en las playas de Sanxenxo tiene mucho que ver con la ola de calor. "Con las altas temperaturas, la gente se mete en el agua igualmente con la marea baja, y ahí es donde están las fanecas", asegura. Esta ha sido, precisamente, una estampa muy repetida en las últimas jornadas de playa.
