La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra ha otorgado firmeza a un dictamen elaborado por el Juzgado de lo Penal 3 de Pontevedra que contempla la condena a penas de multa que, sumadas, alcanzan los 2.700 euros, para tres controladores de accesos de un establecimiento de hostelería del puerto deportivo de Sanxenxo que agredieron a un cliente en el momento de instarle a abandonar las instalaciones del local.
Los hechos relatados ocurrieron sobre las cuatro de la madrugada del 5 de agosto de 2018, cuando "en el interior del establecimiento, y ante un comportamiento inadecuado, el agredido fue invitado a abandonar el local por los empleados del mismo, los acusados, mayores de edad y con antecedentes penales", detalla la sentencia.
"Los tres, con el ánimo de menoscabar su integridad física, lo arrojan al exterior del local", añade le juez en su dictamen. En un primer momento, uno de ellos lo levanta "agarrándolo en peso fuertemente por los brazos, y lo lanza al suelo". A continuación, los otros dos acusados "lo volvieron a agarrar y lo arrojaron de nuevo al suelo, al exterior del local".
Por los hechos, la víctima sufrió una herida en la cabeza que precisó de puntos de sutura, además de erosiones en los brazos y en las piernas. La misma sentencia asegura que no consta acreditado que la víctima hubiese agredido en ningún momento a la mujer que se hallaba en la taquilla del establecimiento.
Por lo sucedido, además de pagar las costas judiciales e indemnizar al agredido con 310 euros, los acusados son considerados autores de un delito de lesiones y condenados a nueve meses de multa con cuota diaria de 10 euros.
Los condenados podrá recurrir ante el Tribunal Supremo.
