A Toxa, en el top de destinos más caros de España para alquilar este verano

A 2.900 euros la semana, la isla ya roza los precios exclusivos de Puerto Banús y Mallorca. O Vicedo ofrece los apartamentos más baratos del país, con ofertas a 350 euros en agosto

 Piso turístico en Sanxenxo. GONZALO GARCÍA. DP
photo_camera Piso turístico en Sanxenxo. GONZALO GARCÍA. DP

A un mes de que empiecen las vacaciones para muchos, Galicia es un destino con tirón sobre todo entre los madrileños y los andaluces y, poco a poco, va atrayendo a más extranjeros. Y ese tirón se nota en los precios de los alquileres en primera línea de playa. Según los datos del Grupo Tecnitasa, la comunidad gallega es el territorio con la horquilla más amplia al reunir la oferta más barata del país y una de las más caras para agosto. Una semana en un apartamento de 60 metros cuadrados en O Vicedo sale por 350 euros, la referencia más económica de España, seguida de Burela, donde la misma operación con un piso un poco más grande, de 75 metros, se eleva a 450 euros, una renta media por la que también es posible alojarse en Santa Cruz de Tenerife o en Las Palmas.

En 2019, era posible hospedarse en Burela por 210 euros y, en O Vicedo, por 250, lo que da buena cuenta de lo que se han disparado los pisos turísticos, un mercado que cada vez suma más propietarios adeptos por su rentabilidad. Pese a la inflación, A Mariña es el destino más competitivo del norte. En Asturias, la opción más barata es Tapia de Casariego, con los 545 euros que cuesta despertarse ante la Playa del Murallón.

Quien se decante por las Rías Baixas y tenga posibles podrá disfrutar de una semana en A Toxa por 2.900 euros en un apartamento de 80 metros. Son cien euros más que hace un año y hasta un 61% más que en la temporada estival del año previo a la pandemia. La isla del concello de O Grove está entre los destinos top de España, pues solo se paga más —unos 3.000 euros por siete días— en el exclusivo Puerto Banús, en Marbella; en la costa cántabra, concretamente en la localidad de Liencres, y en Santany, en Mallorca.

Con A Toxa a la cabeza, la comarca de O Salnés es donde más hay que rascarse los bolsillos, pues los pisos se cotizan en Sanxenxo en una horquilla que va de los 1.350 euros que piden en la segunda línea en Silgar, los 1.500 de Portonovo y los 2.200 que cuesta mirar al océano desde la primera línea sanxenxina.

Tirando hacia A Coruña, tampoco es barato veranear frente a Riazor. Cuesta 1.200 euros por semana. Por encima de la cota de los 1.000 euros también están Panxón y Praia América, en Nigrán, y Langosteira en Fisterra. Con atractivos como el faro y una de las puestas de sol más famosas de España, al fin del mundo llegan cada vez más peregrinos y visitantes.

Tecnitasa, que es la segunda tasadora de España por volumen de negocio, estima que, de media, pasar las vacaciones con vistas al mar se ha encarecido un 3,8% en el país en términos interanuales, hasta los 1.055 euros, una cifra que, a su vez, refleja un incremento del 22% en relación al verano de 2020, cuando el turismo se vio frustrado por el covid.

Junto con Baleares, Canarias y País Vasco, la compañía sitúa a Galicia entre las comunidades en las que los alquileres vacacionales se han encarecido con mayor intensidad, más de un 6%.

"Para esta temporada, se constata una mayor antelación en la contratación de los alquileres de viviendas a pie de playa, dada la alta demanda existente", señala el presidente de Tecnitasa, José María Basañez, según el cual hay viajeros que cierran sus vacaciones "con más de seis meses de antelación para evitar sorpresas de última hora".