Vendió cara su derrota el Arosa, que dispuso de ocasiones para voltear el resultado o, al menos, llevar a la prórroga su segundo duelo copero de la temporada ante un rival de Primera. El previsible adiós al torneo del KO, al medirse a un adversario que milita cuatro categorías por encima, dejó, sin embargo, buenas sensaciones, ya que los pupilos de Luisito compitieron de tú a tú ante un Valencia plagado de suplentes y que decidió la eliminatoria con un gol tempranero de Yaremchuk. Una doble ocasión de Borja Míguez al comienzo del segundo acto y las postreras oportunidades de Sylla y Mella pudieron cambiar el devenir de un encuentro que debe servir como estímulo para el cuadro arlequinado en su lucha por regresar a Segunda Federación.
El entusiasmo en A Lomba, tras un par de escaramuzas de Borja Míguez, sufrió un jarro de agua fría con el tempranero gol de Yaremchuk, el primero del delantero ucraniano con la camiseta del Valencia en partido oficial, que mandó al fondo de las mallas un balón suelto. Corría el minuto 9.
El Arosa pudo lograr el empate, tres minutos después, de la forma más insospechada: Jaume, en un exceso de confianza, golpeó con poca pericia y estrelló la pelota contra Iñaki, aunque el rebote no tuvo la fuerza suficiente para que alcanzara la portería de la escuadra valencianista.
El conjunto de Rubén Baraja, plagado de reservas y jugadores con pocos minutos, no rebajó la intensidad, pese a jugar con el marcador a favor, y los pupilos de Luisito se afanaron en el trabajo defensivo para tratar de sorprender en alguna transición o, cuando se animó a presionar arriba, con algún robo cerca del área rival.
La topera en la que se fue convirtiendo el césped de A Lomba, en una noche sin lluvia, pero muy fresca, no ayudó a la vistosidad del partido. Tampoco la ansiedad de la escuadra arlequinada, que cayó en varios fueras de juego y a la que le quemaba el balón en los pies. Borja Míguez, en los envíos en largo, casi siempre tenía las de perder ante el poderío físico de Diakhaby y Cenk. Otro error del cuadro valencianista, una cesión algo corta de Iranzo a Jaume a la que no pudo llegar Iñaki, volvió a animar al conjunto rojiblanco superada la media hora.
Se fue creciendo el cuadro vilagarciano y acabó el primer tiempo achuchando al Valencia, aunque los intentos de Carús y Borja Míguez se perdieron lejos de la meta de Jaume, que dio muestras de su inseguridad en la salida a una falta lateral en la que su defensa minimizó el error.
Salió con la misma decisión el Arosa tras el intermedio y disfrutó de una doble ocasión por medio de Borja Míguez. Primero cabeceó un centro de Cotilla desde la izquierda que obligó a Jaume a lucirse, aunque tuvo más mérito la segunda intervención del cancerbero valencianista, tras quedar el balón suelto. Sylla, poco después, cruzó demasiado un disparo desde fuera del área.
Luisito movió piezas al filo de la hora de juego: retiró al amonestado Javi Pereira y dio entrada a Martín Diz, que puso un balón de oro desde el peril izquierdo para Iñaki, incapaz de conectar un remate mejor al escurrirse.
El Valencia, que llevaba muchos minutos sin inquietar al conjunto arlequinado, puso a prueba a Raúl Rodríguez, titular de nuevo en Copa, en un lanzamiento de falta de Amallah. Instantes después, Baraja realizó un doble cambio y Luisito apostó por dar entrada a Concheiro y Mella a un cuarto de hora del final. No cejó el Arosa en su intento de buscar el gol ante un rival más poderoso física y técnicamente. Lo tuvo a su alcance en una doble oportunidad tras un robo a Cenk de Rubo, el último cartucho del equipo rojiblanco, a falta de un par minutos para entrar en los cinco de añadido. Sylla chutó con potencia, aunque excesivamente centrado, y Jaume despejó el cuero. Mella, con todo a favor y sin portero, chutó fuera. Aún volvió a generar peligro en un par de saques de equina el cuadro arousano, que cayó con honor ante un rival de Primera División.
