El debutante Santi Gegunde acaba a balón parado con la resistencia del colista

Al Arosa le costó muchísimo derrotar al colista Arzúa, y lo hizo a balón parado en la segunda parte con un solitario tanto del debutante Santi Gegunde. El precedente de la primera vuelta había terminado huérfano de goles. Los nervios aparecieron en A Lomba mientras campeó el empate. El Arosa, enrabietado por la amplia derrota de la anterior jornada contra el Gran Peña, apostó por la presión alta desde el inicio del encuentro, mientras que el 'farolillo rojo' sufrió para adaptarse al castigado césped de A Lomba.

El dominio local no se tradujo en ocasiones claras. El Arosa volcó el juego por el carril izquierdo, donde Martín Diz e Iñaki Leonardo generaron superioridades que luego se fueron mitigando. Las conducciones se volvieron imposibles con el paso de los minutos. Y el mal estado del césped también provocó errores básicos en golpeos de balón. De esta manera, los locales fueron quedándose sin argumentos durante la primera parte para amenazar a Chema.

El Arzúa, apurado por la presión del Arosa, recurrió al fútbol directo para oxigenar. Iker se peleó con los tres centrales locales y dio salida a un conjunto visitante que, con el paso de los minutos, se fue sintiendo cada vez más a gusto dentro de la parcela defensiva. Los zagueros visitantes se impusieron en el juego aéreo y bloquearon más las bazas ofensivas de los locales. La primera ocasión clara del encuentro llegó en el minuto 32 y le correspondió al colista. Izan puso un centro desde la izquierda que Murilo cazó de cabeza, y Manu Táboas detuvo el remate sin apuros. No obstante, el estado de nervios del conjunto arlequinado pareció aumentar sin freno a medida que se aproximó el intermedio.

Luisito permutó la pareja de delanteros al arrancar la segunda parte. Borja Míguez y el recién fichado Santi Gegunde, procedente del Racing Villalbés, se sumaron al encuentro en detrimento de Rubo y Sylla. Un lanzamiento de falta de Concheiro a los tres minutos de la reanudación hizo lucirse a Chema por primera vez a lo largo del encuentro. Poco después, los arlequinados consiguieron desorganizar la zaga rival, pero un defensa se lanzó al suelo para repeler un envenenado remate a cargo de Iñaki Martínez. Chema realizó dos paradas milagrosas en el minuto 58 ante sendos remates a bocajarro de Iñaki Martínez y Borja Míguez.

La recompensa del gol recayó en la última incorporación de la plantilla, Santi Gegunde, al desviar la trayectoria de un misil de falta proyectado por Concheiro, lo que llevó el delirio a las gradas. Con la ansiada ventaja sobre el último clasificado, el Arosa reordenó las líneas, rebajó el frenesí y concedió algo de protagonismo al Arzúa. Los visitantes lo intentaron, principalmente, mediante acciones de fútbol directo y un cambio de sistema táctico con el que prescindieron de un defensa y sumaron un centrocampista a la causa.

Alberto Mariano, técnico del Arzúa, realizó tres sustituciones después del único tanto del encuentro, pero el Arosa no dio pie a la campanada en su feudo, máxime desde la expulsión postrera del visitante Michaylyszyn, y aprovechó los respectivos pinchazos de Alondras y UD Ourense para escalar al cuarto puesto, además de colocarse a un solo punto del tercero.